La Conferencia Episcopal de El Salvador instó a las autoridades del Gobierno a cumplir con su obligación e investigar el asesinato del sacerdote Walter Osmir Vásquez, ya que dos meses después de ser asesinado no hay resultados.
En nombre de la Conferencia Episcopal, el arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas, reiteró el llamamiento y exigió el “esclarecimiento del suceso” en el que fue asesinado el religioso, así como el de “los demás crímenes” que se comenten a diario en el país.
“Deseamos que todos los crímenes sean debidamente investigados y que en todos ellos, sin excepción, se administre justicia, solo así, por la vía de la verdad y de la justicia, llegaremos a una auténtica paz social en El Salvador”, dijo Escobar en su tradicional conferencia dominical.
Masivo clamor de justicia en funeral del padre Walter
Vásquez Jiménez es el primer sacerdote asesinado desde el fin de la guerra.
Vásquez fue abatido a tiros el Jueves Santo del año en curso, en el municipio de Lolitique, San Miguel, cuando iba a bordo de su automóvil a un acto religioso en la diócesis de Santiago de María, donde se desempeñaba.
Tras conocerse el suceso, las autoridades eclesiásticas condenaron el crimen y se reunieron con miembros del Ejecutivo, quienes se comprometieron a una pronta investigación y resolución del caso del sacerdote asesinado, algo que sigue pendiente.
Monseñor Escobar dijo que en el país el tema de la inseguridad ciudadana sigue siendo “una gran tarea pendiente” de las autoridades y consideró que las decisiones que se han tomado al respecto no están dando los mejores resultados.
“No es secreto para nadie que hay bastante disconformidad, la preocupación del pueblo es genuina en materia de seguridad, este tema ha sido muy cuestionado los últimos años, la sociedad demanda soluciones, seguridad y justicia todos los días”, enfatizó el arzobispo de San Salvador.