Las frecuentes denuncias que han hecho los médicos del Hospital Rosales por el desabastecimiento de medicamentos e insumos, así como una mala administración, les ha llevado a una supuesta represión por parte del director del sanatorio, Mauricio Ventura, aseguró Alcides Gómez.
Lo anterior repercute en una represión laboral con demandas en los tribunales contra los médicos y descuentos salariales, insistió el galeno.
“Lo que hemos hecho es decir que las personas que manejan el Ministerio de Salud son incapaces, que no hay presupuesto adecuado, hemos denunciado la falta de insumos, medicamento y eso es lo que ha causado el malestar en contra de nosotros y no nos arrepentimos”, añadió Gómez.
Ayer, una comisión de siete médicos llevaron una demanda a la Secretaría Receptora de Demandas de San Salvador para interponer un trámite legal en contra del director del hospital, Mauricio Ventura Centeno, por retenciones indebidas al salario de 36 médicos.
Dentro del requerimiento presentado, los médicos solicitan que se les reintegre a 36 emplelados el salario que se les hizo en calidad de descuentos durante los años 2014, 2015 y 2016, debido a la implementación de la marcación biométrica.
Según lo expuesto por los médicos, el personal demandante solo recibió la cantidad de $ 3 a $ 5 en concepto salarial; agregó que la administración de nosocomio tampoco cumplió con la responsabilidad de pago de cotizaciones al Seguro Social ni al Sistema de Pensiones (AFP) a las que se encontraban afiliados los médicos.
Director del hospital Rosales dice que cirujano Tobar no acepta órdenes
El principal problema es que el doctor Antonio Tobar no marca la jornada laboral, según el director. Mauricio Ventura, director del Rosales, dijo que el médico tiene un proceso de destitución en el Tribunal del Servicio Civil y están a la espera de la resolución.
La suma de todos los salarios no pagados por la administración del hospital asciende a unos 700 mil dólares, que los demandantes solicitan sean reintegrados. “Que las autoridades judiciales de El Salvador aplicando principios esenciales del salario y a la seguridad social, reconozcan que la aplicación de tales descuentos implican un acto arbitrario”, sostuvo Gómez.
El médico sindicalista dijo que resoluciones de la Procuraduría de los Derechos Humanos y de la Corte de Cuentas de la República los respalda, ya que ambas instancias emitieron un dictamen a su favor; la primera recomienda a la administración que aplique medidas de índole jurídica para evitar la repetición de retención de salarios, que a juicio de los galenos se sigue dando.
La segunda recomienda que la dirección del hospital implemente controles de asistencia específicos para el personal médico, resolución que no ha sido acatada, ya que los médicos siguen utilizando la marcación biométrica, dijo.
Para Mauricio Ventura, no existe ningún ambiente laboral hostil y explicó que “ese es descuento de ley, todo el que no marca, como no se puede hacer constar y evidenciar que estuvo en el hospital, entonces automáticamente es un descuento. Eso no le pasa a los médicos, si no le pasa a los demás empleados que no marcan”, aseguró.
Para los galenos, la marcación biométrica no es adecuada para el área médica, debido a que muchos de estos pasan más de las 4 horas u 8 horas laborales; por ejemplo, “la gran mayoría (médicos) tenemos contratados cuatro horas y muchas veces debemos operar y llenar expedientes” que llevan más de las horas asignadas de trabajo y, luego, deben hacer un papeleo para que le reconozcan el tiempo de compensación, “por lo que hay que hacer un trámite engorroso”, dice Gómez.
Tanto los médicos del sindicato como el director del hospital manifiestan que las denuncias y las demandas legales que tienen no afectan la atención al paciente “aquí pleito no hay en el hospital porque todos estamos trabajando excepto cinco personas que se dedican a actividades sindical”, dijo Mauricio Ventura.