Los problemas económicos que supuestamente había tenido la periodista Karla Turcios con su pareja, Mario Huezo, fue el detonante para que el sujeto prepara el asesinato de la profesional, dejando una estela de evidencias que llevó a su captura la noche del lunes 23 de abril, según las recientes investigaciones que han realizado fiscales y policías.
“Había violencia por temas económicos fuertes. Tenían inconvenientes serios de pareja, pero la ley no me permite ahondar más en ese aspecto”, afirmó el Fiscal General, Douglas Meléndez.
Meléndez señaló que “hemos corroborado que (Mario Huezo) pasaba chateando y en grupos de juegos telefónicos; prácticamente no trabajaba y era un mantenido”.
El lunes en la noche el sujeto fue arrestado en un hotel capitalino, tras realizar una entrevista a la cadena de noticias de Univisión. Al salir del lugar junto a su hijo, un grupo de detectives de la
División de Investigaciones de la Policía lo capturó y lo trasladó hacia las oficinas de la DIC, donde fue presentado a los periodistas tras ser sometido a chequeos médicos.
Huezo se encuentra bien de salud. Su rostro reflejaba preocupación y trataba de restarle importancia a un larga lista de evidencias que lo involucran en el caso que conmovió al gremio periodístico.
“Me declaro inocente y todas las personas que me conocen saben que yo amaba a Karla. Pido a mi familia que cuide a mi hijo”, expresó el sujeto tras ser capturado.
Después de 24 horas de que apareciera el cadáver de la profesional, el sábado 14 de abril, en una desolada calle del municipio de Santa Rosa Guachipilín de Santa Ana, el director de la Policía, Howard Cotto, advirtió que la declaración de Huezo tenía inconsistencias en la horas de cómo ocurrieron los hechos.
Las siete cámaras y alertas telefónicas que delatan la ruta del presunto asesino de Karla Turcios
El compañero de vida de la periodista asesinada, Mario Alberto Huezo, fue capturado la noche del lunes acusado de feminicidio
Así fue. Huezo siempre estuvo con Karla la mañana del referido día y nunca salió de su vivienda a comprar agua y a un parque para distraer a su hijo de cinco años, como lo expresó a los investigadores. Huezo dijo, primero, que había llevado al pequeño al parque Bicentenario y luego al San Miguelito.
Durante una inusual presentación de un detenido a las 12:00 de la medianoche, Cotto y el jefe fiscal Max Muñoz, informaron sobre las principales evidencias que dejó el sujeto cuando mató a su pareja y luego de deshizo de su cadáver.
Ambos funcionarios coincidieron en que una de las principales evidencias que comprometen a Huezo con el caso es que en todo momento el celular de Karla, el número 7682-5078, siempre estuvo junto al móvil de él, de acuerdo con el sistema de geolocalización satelital que consultaron los investigadores; es decir que Huezo estuvo con el cadáver de su pareja en todo el trayecto desde la colonia Costa Rica hasta Santa Rosa Guachipilín.
También el registro de siete cámaras instaladas en las principales carreteras donde el sujeto pasó con su carro negro, vidrios polarizados, coinciden en el tiempo con las alertas que emitieron las antenas telefónicas. Los registros establecen que los celulares permanecieron alrededor de ocho minutos en la zona donde fue localizado el cuerpo de la profesional.
Muñoz señaló que en algunas imágenes se observa la silueta de un niño que viajaba en el asiento del copiloto, es por eso que se cree que el hijo de ambos iba con su padre y el cadáver de su madre.
Diez claves que delataron al presunto asesino de la periodista Karla Turcios
Mario Huezo cometió varias contradicciones al declarar sobre la "desaparición" de la comunicadora.
Otra de las pesquisas fue un anónimo que se le cayó del bolsillo a Huezo al momento de presentar su dui en Medicina Legal en Santa Ana, para identificar el cadáver de su pareja. El papel era similar a otro que les entregó a los investigadores que fue encontrado abajo de su carro en su casa, donde se leía “Adiós a su hija, Lic. P-erro”. Huezo dice que “no sabe cómo apareció en su bolsa, quizás alguien se la metió”.
También el imputado simuló que Karla se bañó en la casa luego de quitarse la ropa de dormir. La víctima fue encontrada muerta con la misma ropa con la que trabajó el día anterior en la Prensa Gráfica (viernes 13 de abril). Por estar desvelada, durmió con el mismo pantalón y una blusa negra.
Asimismo, no coincide la hora que Karla fue asesinada. El sospechoso mintió, pues dijo que salió de su vivienda (12:00 del mediodía) a comprar agua y a llevar al niño a un parque. El informe forense dice que Karla fue asesinada entre las 10:00 de la mañana y 12:00 del mediodía del sábado.
Hasta hoy las investigaciones sólo revelan que Mario fue el único que participó en el crimen de Karla. Será acusado de feminicidio agravado, por lo que podría enfrentar una pena de 50 años de cárcel.
Joven cocinera es acribillada por pandilleros en el bulevar Constitución
"Ella era una mujer tranquila, trabajaba para mantener a su niña de dos años, apenas hace tres meses había comenzado en el comedor del mercado", señaló la tia. La Policía confirmó que la víctima había sido amenazada por miembros de la pandilla 18 revolucionarios que controlan el sector, aunque sin especificar porque habrían sido las amenazas.