La red de pornografía infantil descubierta recientemente por la Fiscalía General había creado más de 20 grupos en la aplicación digital WhatsApp en la que compartían y distribuían material de explotación sexual infantil a los usuarios, según la Fiscalía General en su intervención en la primera audiencia en contra de 30 acusados de integrar esa estructura que operaba a nivel internacional.
La audiencia fue instalada por el juzgado Antimafia de Instrucción A de San Salvador contra los 30 acusados de distribuir pornografía infantil a nivel internacional.
A uno de los imputados le decomisaron dos teléfonos celulares en los que tenía unos ocho grupos de WhatsApp de hasta 500 usuarios de no menos diez nacionalidades con quienes compartía las imágenes de explotación sexual infantil.
Éstos grupos habían sido creados en el año 2018, según las investigaciones fiscales. Para poder acceder a esos grupos, los usuarios tenían que cumplir con una serie de reglas.
Lo más grave, según dijo una fiscal, es que se les divulgó sus rostros a las víctimas en las redes sociales.
“La investigación continúa, solo nos quedamos con el grupo nacional, pero la investigación va a continuar a fin de determinar el origen de esta reproducción del material pornográfico infantil”, dijo una de las fiscales del caso.
Explicó que los 30 imputados enfrentan los cargos penales de adquisición, distribución y reproducción del referido material de explotación sexual por los que podrían recibir penas que van desde los 7 a los 12 años de prisión, en caso sean condenados.
Los fiscales pidieron en la audiencia que los 30 imputados sigan detenidos en la etapa de instrucción. Hay otros cuatro acusados que son prófugos.
Defensores alegan que acusación de Fiscalía tiene vacíos legales
Rey Nóchez, defensor de uno de los acusados, aseguró que los fiscales violaron el artículo 24 de la Constitución que establece que las comunicaciones son inviolables porque les sustrajeron la información de sus teléfonos celulares sin una orden judicial.
“De efectuar la extracción de ese material que constaba en un teléfono que se dice que no es de él sino que de su madre, debió haberle solicitado previamente a la autoridad judicial, una especial autorización para poder ver que material tenía ese teléfono y eso no se cumplió, tampoco”, dijo Nóchez.
Otro de los defensores, Carlos Avelar explicó que “muchas veces pueda que llegue un contenido o un material prohibido, pero no lo ha buscado ni lo ha hecho de manera intencional la persona, por lo tanto esos aspectos debe de considerarse”.
Agregó que es pornografía infantil que “ha sido creada en otros países del mundo y que ha llegado a este país, donde le pudo haber llegado a cualquier persona vía WhatsApp”.
La decisión del juzgado Antimafia de Instrucción A será conocida a las 11:00 a.m. de este miércoles.