Madre y tía de un motociclista retenido enfurecen y golpean a una mujer policía en Santa Ana

Las mujeres intentaron quitarle el arma a la agente que realizaba un patrullaje en Santa Ana. Un juez las ha condenado a tres años de trabajo de utilidad pública.

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Foto referencia-archivo EDH por Mauricio Cáceres.

Por Mirella Cáceres

2019-07-19 11:19:07

Dos mujeres han sido condenadas penalmente por un juez luego de ser acusadas de atacar a una mujer policía en Santa Ana y de resistirse de manera agresiva al arresto.

La condena fue impuesta el jueves, pero los hechos se remontan al 13 de enero pasado. Ese día, a las 10 de la mañana frente a la cancha de fútbol del Reparto IVU Los 44, de Santa Ana, agentes de la Policía Nacional Civil que patrullaban la zona, ordenaron detenerse a un hombre a bordo de una motocicleta placas M-3252677. Pero éste quiso evadirlos, según consta en el expediente judicial.

Sin embargo, lo agentes lograron que se detuviera para verificar la documentación del motociclista, identificado como Marvin Vladimir Rivas Quijada, y “practicarle una requisa personal”, dice el reporte de Juzgados, los agentes descubrieron que el hombre no portaba licencia de conducir.

En ese momento, dos mujeres que estaban a unos metros de allí, empezaron a insultar a los agentes de la Policía. Un hombre que presenciaba la escena intentó calmarlas diciéndoles que los policías solo hacían su trabajo.

Pero lejos de calmarse, las mujeres comenzaron a caminar en dirección de los policías y se lanzaron contra uno de ellos, quien era una mujer, causándole laceraciones en el cuello, dice la acusación.

Marta de Jesús Quijada de Rivas, de 38 años de edad, quien resultó ser la madre del motociclista sin permiso de conducir, intentó arrebatarle la pistola a la policía mientras Sandra Corina González de Lucero, de 41 años y tía del motociclista, le tomaba del cabello. La intención era neutralizar a la agente, dice el expediente.

Al ver la agresión de las dos mujeres auxiliaron a su colega y neutralizaron a las agresoras, mientras trataban de impedir que una “multitud” que estaba en la cancha porque se jugaba un torneo de fútbol, no se involucrara en el hecho.

Quijada de Rivas y González de Lucero fueron llevadas ante el juez acusadas de resistencia agresiva, por lo que fueron condenadas hace dos días y se les impuso una pena de tres años de cárcel, la cual van a cumplir con 144 jornadas de trabajo semanales de utilidad pública cada una.

Las condenadas tendrán que cumplir esas jornadas en horarios y lugares que determine un Juez de Vigilancia Penitenciaria y de Ejecución de la Pena competente. Según Juzgados, también se les inhabilitó de manera absoluta de los derechos de ciudadano, por tres años, equivalente a la pena que se les impuso.