Los talibanes ordenaron a los vendedores de ropa de la ciudad de Herat, en el oeste de Afganistán, la decapitación de los maniquíes de sus tiendas, debido a que consideran que se oponen a la interpretación de la ley islámica.
Esta directiva se suma a las otras medidas de los talibanes para imponer medidas en el país acorde a la visión estricta del islam, que limita libertades públicas, más específicamente a las mujeres y las niñas.
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"Hemos pedido a los comerciantes que corten la cabeza de los maniquíes, porque va contra la ley (islámica) de la 'sharía'", confirmó el miércoles a la AFP Aziz Rahman, jefe del servicio de Promoción de la Virtud y Prevención del Vicio en Herat, ciudad de unos 600.000 habitantes y tercera gran urbe del país.
"Si se limitan a cubrir la cabeza, o esconden el maniquí (totalmente), el ángel de Alá no entrará en la tienda o en su casa para bendecirlos", dijo.
La medida se utiliza para seguir la ley islámica de las representaciones humanas. Vídeo de carácter ilustrativo y no comercial. https://twitter.com/natiqmalikzada/status/1478028602813779972
En videos que circulan en Internet se ve a comerciantes cortando con sierras las cabezas de maniquíes femeninos de plástico.
Por el momento, los talibanes no han emitido ninguna orden a nivel nacional sobre estas figuras de plástico, que no tienen cabida en su estricta interpretación de la ley islámica, puesto que prohíbe las representaciones humanas.
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La primera vez que los talibanes impusieron un régimen en el país, ordenaron destruir varias estatuas históricas de budas, algo que también conmocionó al mundo.
Aunque los talibanes prometieron ser más moderados, en una acción para recibir la ayuda humanitaria internacional, muchas de sus acciones van en una dirección contraria a lo que prometieron al principio del régimen el año pasado.