Elena Manighetti y Ryan Osborne, una pareja proveniente de Reino Unido, habían decidido navegar por el océano Atlántico desde las Islas Canarias hasta el Caribe antes de que iniciara la pandemia del coronavirus.
La pareja dejó su trabajo, compraron un barco y decidieron iniciar su viaje. Pasaron 25 días en el mar y tuvieron poca comunicación con el exterior. Se habían quedado sin señal en sus celulares.
Cuando recuperaron señal de teléfono, mientras todavía navegaban por la costa, descubrieron que las fronteras de la isla del Caribe, en las que pensaban atracar, estaban cerradas y que el mundo atravesaba una pandemia de la que no habían oído nada, relató la BBC Mundo.
“En febrero habíamos oído que había un virus en China, pero con la poca información que teníamos imaginamos que al llegar al Caribe todo habría terminado”, dijo Manighetti.
Sin poder atracar
El no tener comunicación con nadie empeoró la situación, ya que no tenían ni idea de lo grave que sucedía.
“Les dijimos a nuestros contactos en tierra que no queríamos escuchar malas noticias”, contó la joven.
“Primero intentamos atracar en uno de los territorios franceses en el Caribe, pero cuando llegamos descubrimos que todas las fronteras estaban cerradas y que las islas no permitían el ingreso”, explicó Osborne.
La pareja decidió desviar su viaje a Granada, ahí lograron obtener señal suficiente para poder busca información y enterarse de lo que pasaba en la tierra.
“Una amiga nuestra ya estaba en San Vicente, que es donde pretendíamos dirigirnos. Nos las arreglamos para ponernos en contacto con ella 10 horas antes de llegar al muelle. Nos dijo que nos negarían la entrada ya que soy ciudadana italiana, a pesar de que no había estado en Italia en meses” confesó la mujer a la BBC.
La pareja logró atracar en Italia gracias a que habían registrado el recorrido de su barco a través de la señal de GPS, así lograron demostrar que no habían estado en Italia y llevaban más de 25 días aislados en el mar.
Imposible de creer
Para Ryan y Elena la situación fue sorprendente. En unos pocos días que estuvieron lejos todo cambió.
“Mi ciudad natal está en la región italiana de Lombardía, que ha sido una de las más afectadas en el mundo”, dijo la mujer.
Elena narró al portal de noticias que la conversación que tuvo con su padre fue la más difícil.
“Me dijo que no entrara en pánico. Me envió un perfil del New York Times de nuestra ciudad natal, lo que hizo que todo se sintiera repentinamente real. Me sorprendió”, relató.
Para la mujer fue impactante saber que la pandemia del coronavirus había causado tantas muertes hasta el punto que ni hubiese espacio en los cementerios ni atúades.
La pareja ahora se encuentra en cuarentena y no saben cuánto tiempo estarán en Bequia, San Vicente pero esperan que cuando todo acabe puedan continuar con su viaje explorando el Caribe.