Bukele no está entre los invitados por el presidente Biden a Cumbre por la Democracia

El Salvador está entre ocho países de América Latina y el Caribe que no han sido tomados en cuenta para la reunión, según un artículo publicado en el Miami Herald. Nayib Bukele ha sido duramente criticado por funcionarios estadounidenses debido a sus acciones antidemocráticas.

descripción de la imagen
El presidente utiliza las redes como un Diario Oficial, señala HRW. Por ello, bloquear usuarios es impedirles el acceso a información clave sobre el gobierno. Foto / AFP

Por Jorge Beltrán Luna

2021-11-14 9:51:45

Próximamente, el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, convocará a unos 100 líderes mundiales a su Cumbre virtual por la Democracia; pero el presidente salvadoreño Nayib Bukele no está entre ellos, afirma Andrés Oppenheimer, en un artículo publicado en el diario Miami Herald.

La cumbre se realizaría del 9 al 10 de diciembre próximo.

“Hay ocho naciones de América Latina y el Caribe que no han sido invitadas a la cumbre, me dicen funcionarios estadounidenses”, afirma Oppenheimer.

El Salvador, Cuba, Venezuela, Nicaragua, Bolivia, Guatemala, Honduras y Haití son los países que han sido marginados de participar en la Cumbre virtual por la Democracia.

En poco más de dos años, la democracia salvadoreña ha sido severamente golpeada con acciones antidemocráticas emprendidas por el presidente Bukele, quien el 9 de febrero de 2020 invadió la Asamblea Legislativa acuerpado por militares y policías.

Luego comenzó a ocultar información sobre el manejo de las finanzas públicas durante la pandemia de COVID-19 hasta anular la autonomía del Instituto de Acceso a la Información Pública (IAIP), destituyendo a comisionados elegidos conforme a la legislación y nombrando en su lugar a personas afines a su gobierno, vinculadas a instituciones del Ejecutivo.

TAMBIÉN: Las relaciones entre EE. UU. y El Salvador “no están sólidas”, dice Jean Manes

Pero fue desde el 1 de mayo de este año cuando Bukele incrementó los golpes antidemocráticos. Valiéndose de tener la mayoría calificada en el Órgano Legislativo, desde el primer día, la bancada oficialista destituyó a magistrados de la Sala de lo Constitucional y reestructuró la Corte Suprema de Justicia en su totalidad, nombrando como nuevos magistrados a abogados afines a Bukele, sin observancia del proceso de elección establecidos en la legislatura salvadoreña.

Además, ese mismo 1 de mayo, la bancada oficialista destituyó al fiscal general de la República e impuso a uno de los suyos.

Todas esas acciones han provocado que las relaciones entre el gobierno de El Salvador y el de Estados Unidos "no estén sólidas", como lo señaló recientemente Jean Manes, Encargada de Negocios en la embajada de Estados Unidos en El Salvador.

“No están sólidas, obviamente estamos en un momento muy complicado con el gobierno de El Salvador. De nuestra parte siempre vamos a tratar de seguir trabajando con los salvadoreños y vamos a buscar todos los caminos para que podamos hacerlo; creemos en nuestra relación, queremos la mejor relación pero simplemente no podemos mirar para otro lado cuando hay un declive en la democracia”, aseveró Manes en declaraciones a periodistas al ser consultada por la situación que atraviesan las relaciones bilaterales.

Por fomentar acciones antidemocráticas, varios funcionarios de la administración Bukele han sido incluidos en la Lista Engel, según lo han dicho funcionarios estadounidenses.

De acuerdo con Oppenheimer, la Cumbre convocada por Biden es una mejora con respecto al enfoque hacia la democracia y derechos humanos que el expresidente Donald Trump le daba a estos dos aspectos.

“Pero Biden debería tener más cuidado con a quién invita a su reunión, o con qué lugar les asigna en la mesa”, añade el columnista, que critica que en la lista preliminar de países invitados estén los mandatarios de México, Argentina, Filipinas y Polonia.

VER: “Este es el peor momento para tener las peores relaciones con Estados Unidos”, afirma Leonor Selva de ANEP

“México y Argentina tienen presidentes elegidos democráticamente, pero respaldan las dictaduras cubana, venezolana y nicaragüense”, puntualiza Oppenheimer.

El pasado 7 de noviembre, el presidente Biden calificó de “farsa electoral”, al proceso electoral realizado en Nicaragua. “En el día de hoy, el presidente nicaragüense Daniel Ortega y su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, montaron un simulacro de proceso electoral que no resultó libre ni justo y, claramente, tampoco democrático”, rezaba un comunicado de la Casa Blanca, al respecto.

Respecto de El Salvador, diversos funcionarios han pedido a Bukele que dé muestras de comprometerse con la gobernanza democrática, además de haber criticado un fallo de la Sala de lo Constitucional, reestructurada en mayo de este año con magistrados impuestos afines a Bukele, que habilita la reelección presidencial inmediata.