La caída de una cabina de teleférico provocó este domingo la muerte de 14 personas en Stresa, localidad de la región italiana del Piamonte (noroeste) a orillas del lago Mayor, según los servicios de rescate.
Después de ofrecer un "balance definitivo" de 13 muertos, los servicios de rescate anunciaron poco después que uno de los dos menores heridos graves, un niño de nueve años, no pudo sobreponerse de sus heridas y falleció. Entre las víctimas mortales, además, figuran extranjeros.
El presidente italiano, Sergio Mattarella, y el primer ministro Mario Draghi expresaron su "profundo dolor".
El accidente se produjo hacia las 12H30 (10H30 GMT) a 100 metros de la última estación del teleférico y pudo deberse a la rotura de un cable, provocando la caída de la cabina con 15 personas en su interior.
La cabina cayó unos 15 metros y luego rodó por una parte de la ladera antes de estrellarse contra un árbol, dijo un responsable local de los Carabineros.
Imágenes de bomberos mostraban los escombros de la estructura en una zona boscosa cuya fuerte pendiente dificultaba el acceso.
El hecho se registró a 300 metros de la estación de llegada, en Maottarone, y a 1,490 metros de altitud, cuando cedió el cable y la cabina se estrelló en un bosque.
La cabina "estaba a punto de llegar a Mottarone. Sin embargo, en un momento dado, comenzó a retroceder. Probablemente chocó con el poste en el camino de vuelta y salió despedida", explicó la alcaldesa de Stresa, Marcella Severino.
En la localidad, las emociones estaban a flor de piel. Luisa Tesserin, una estudiante de 27 años de Génova, pasaba el fin de semana en el lago.
"Vine a Stresa con amigos para subir a la cima del Mottarone porque la vista es estupenda. Tomamos el teleférico una hora antes de la tragedia. Cuando subimos, no notamos nada extraño en el cable, todo era normal", dijo a la AFPTV.
El presidente de la región piamontesa se declaró "devastado". "Es una tragedia enorme, que nos deja sin aliento" reaccionó Alberto Cirio.
El popular teleférico turístico que conecta en 20 minutos el pueblo de Stresa con el monte Mottarone y que ofrece una vista espectacular de los Alpes estuvo cerrado entre 2014 y 2016 por trabajos de mantenimiento. Tras los meses de confinamiento por la pandemia, había reabierto sus puertas el pasado 24 de abril.
Tras el accidente, la fiscalía de Milán abrió una investigación por homicidio involuntario y lesiones por negligencia.