Aunque la exembajadora de Estados Unidos en El Salvador, Mari Carmen Aponte, consideró que la cercanía entre el gobierno de Nayib Bukele y el de Donald Trump no afectará la relación del mandatario del país centroamericano cuando asuma la nueva administración de Joe Biden, señaló que Bukele debe dar muestras de cambios en varios aspectos como el combate a la corrupción, así como el respeto de la institucionalidad y el estado de derecho.
“Es cuestión de analizar cómo Bukele reacciona a las cosas que son importantes dentro de la democracia para los Estados Unidos y ante la corrupción”, subrayó Aponte este martes durante la entrevista matutina República del canal 33, donde participó vía videollamada junto a la exlegisladora demócrata del Estado de Maryland, Ana Sol Gutiérrez.
A criterio de la exdiplomática, “después de que haya cuentas claras entre la administración de Biden y Bukele todo funcionará, pero eso requiere de cambios que aún no hemos visto en la administración del presidente Bukele”, tales como “la tolerancia en contra de la corrupción, la institucionalidad, el darle el valor apropiado a las leyes, respetar el estado de derecho como parte integral de la forma de gobernar en El Salvador”.
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La exsenadora Sol Gutiérrez, por su parte, cuestionó las acciones de Bukele al adular el trabajo del actual presidente estadounidense Donald Trump.
“Yo creo que a mal palo se arrimó el presidente Bukele al admirar tanto a esta mano fuerte que daba el presidente Trump en todo lo que hacía de una manera abusadora de no respetar los derechos humanos”, expresó.
Añadió que “la historia nos ha demostrado que Biden sí es alguien que respeta los derechos humanos y en su política internacional va a ser basado en eso, que el pueblo americano siempre ha sido líder y exigido que los países y los gobernantes sigan el camino hacia la institucionalización democrática y que haya mucha más apertura y apoyo a la democracia, cosa que queda mucho por verse todavía dentro de la presidencia de Bukele”, afirmó la exlegisladora.
Durante su intervención, la excongresista sostuvo que “el nuevo gobierno (Biden) tiene la mano que dirigirá y regañará a los países latinoamericanos cuando la democracia no se esté respetando”.
Postura que fue secundada por Aponte al comentar que “el presidente Biden estará bastante atento y dando mensajes consistentes acerca de la falta de tolerancia para la corrupción”.
Ambas exfuncionarias estadounidenses se refirieron, además, a las proyecciones del gobierno electo del país del norte y la política exterior que tendrá con El Salvador.
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