En medio del caos y la barbarie que gobiernan en Afganistán el “líder supremo” hizo una repentina aparición tras los rumores que aseguraban había fallecido tras vivir en la clandestinidad en Kandahar, mulá Hibatullah Akhundzada, había hecho una primera y única aparición en 2016.
Este domingo hizo una repentina aparición en la escuela coránica de Kandahar protegido por un convoy de dos vehículos y guardias de seguridad fuertemente armados, dirigió un breve discurso de 10 minutos en los que no permitió se difundiera video ni fotografías.
Sin embargo, los medios locales han compartido las declaraciones a través de un audio que señala “El comandante de los creyentes, el jeque Hibatullah Akhundzada, se presentó ante una gran congregación en la famosa madraza Darul Uloom Hakimah y habló durante 10 minutos con sus valientes soldados y discípulos” dijo el gobierno talibán.
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En el audio se escucha claramente cuando el mulá recita oraciones y bendiciones. Durante el audio no se encuentran comentarios políticos y pide la bendición de Dios para la dirigencia talibana.
“También oró por los mártires del movimiento, los combatientes heridos y el éxito de los funcionarios del Emirato Islámico en esta gran prueba” señala un comunicado difundido por los medios locales y agrega “Que Dios recompense al pueblo de Afganistán que luchó contra los infieles y la opresión durante 20 años” en las declaraciones del extremista en su aparición.
Tras 75 días en el poder Amnistía Internacional brindó un contundente comunicado en el cual señala una larga lista de violaciones a los derechos humanos y la libertad de expresión.
El líder talibán mantiene una postura ausente y misteriosa
Hasta la retirada de las fuerzas estadounidense nadie sabía con exactitud donde se encontraba y había fuertes rumores que ya no se encontraba con vida.
Akhundzada fue designado líder de los talibanes en una rápida transición de mando luego de que un ataque estadounidense con drones matara a su antecesor, mulá Akhtar Mansour, en 2016.
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Los rebeldes habían afirmado que mantenían reuniones constantes con su líder para informarle sobre la situación en Afganistán y la toma del control, aunque fuentes locales señalan que este poco se involucra en dirigencias militares y tiene mayor participación en actividades religiosas.
“Él le da consejos a todos los dirigentes del Emirato Islámico de Afganistán y nosotros seguimos sus reglas, sus consejos, y si tenemos un gobierno que progresa, es gracias a él” agregó una fuente.