Karla Ortiz, una joven de 22 años que tenía siete meses de embarazo, falleció con síntomas de COVID-19 en Culiacán, Sinaloa, México y la familia acusa de negligencia médica.
En redes sociales, la madre de Ortiz ha denunciado que la joven fue trasladada de hospital en hospital y la noche en que ingresaron la joven la dejaron sola y acusa a que el bebé murió porque “no había ginecólogo”.
La madre de la joven, identificada como Mónica Torres, narró que su hija inició el pasado 24 de mayo con fuertes dolores de cuerpo.
En un inicio pensaron era consecuencia de su embarazo. Sin embargo, al persistir los dolores decidieron llevarla a un centro médico.
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En el Hospital General de Eldorado le dijeron la llevara el Hospital de la Mujer, estando ahí la ingresaron. Tenía 39 grados de temperatura, dolores de cuerpo y dificultad para respirar.
“Salió un médico y me dijo ‘¿sabes qué? No puedo tener a tu hija aquí porque me va a infectar a todas las mamás que vengan o que ya están aquí. Probablemente ella tenga sospecha aún, próxima a covid, entonces no puedo tener a tu hija aquí, no sirve el tomógrafo para hacerle una tomografía’”, contó.
Horas después la mandaron para el Hospital General de Culiacán y luego la regresaron al Hospital de la Mujer.
“Y me dijo el doctor ‘lo que pasa es que no la quisieron allá’ me dijo, ‘no la quisieron allá por su estado de sospecha a covid”, citó el portal Noroeste.
Tras una sencilla revisión, la joven fue enviada a casa y le recetaron medicamentos.
Pasaron los días y la joven no mejoraba. La familia decidió llamar a una ambulancia y fue ingresada al hospital donde fue atendida y comenzó a mostrar mejoría.
La señora Mónica Torres aseguró que su hija se había recuperado poco a poco, en las llamadas telefónicas que mantenía con ella y toda su familia, les decía que se sentía mejor y que contaba las horas para que fuera dada de alta el 13 de junio, relató portal de noticias Infobae.
En la última llamada, la joven le dijo a la madre que la habían inyectado y la dejaron encerrada en la habitación. Karla aprovechó para pedirle que cuidara a sus otros dos hijos pequeños.
Un día después la familia fue informada de la muerte de la joven y del bebé.
El caso ha generado indignación en la familia. Torres dijo que murió presuntamente por negligencia médica, ya que los doctores le comentaron que no habían hecho una cesárea a su hija previo a su fallecimiento porque no contaban con ginecólogos.
“¿Por qué pasó esto? ¿Cómo es posible que le cerraron la puerta de su cuarto a las 11 de la noche, me la dejaron sola y la encontraron muerta a las 6:15 de la mañana del siguiente día? ¿Por qué dejaron morir a la bebé de casi siete meses de gestación? Agachó la cabeza y me dijo ‘no sé qué pasó, ella estaba bien, esto fue de repente’. Agachó la cabeza y ¿sabe qué me dijo? `No tenemos ginecólogo, no había ginecólogo a esa hora”, narró Torres.