De acuerdo con el diario inglés The Mirror, una mujer china de 25 años, llamada Chen, pasó dos años enteros exponiendo su vista al brillo máximo de la pantalla de su celular todas las noches con las luces apagadas, lo que resultó en quemaduras graves en su córnea.
El daño ocular resultó ser tan grave, que los médicos dijeron que habían “más de 500 agujeros” en la córnea y que parecía que sus ojos hubieran sido “horneados en un microondas”.
Pese a que ya le resultaba dificultoso ver y sentía mucho dolor, Chen acudió al hospital cuando en su ojo izquierdo se tornó oscuro. Al evaluarla, los especialistas descubrieron que el uso del celular por la noche, y con el máximo brillo, había provocado la ruptura de los vasos sanguíneos. Su córnea izquierda estaba congestionada de sangre.
Una de las doctoras que la atendió, Qiu Wangjian, del Hospital Popular de Songgang, reveló que “la paciente se quedó despierta toda la noche jugando con su teléfono móvil. A la mañana siguiente, tan pronto como se despertó, levantó su teléfono y comenzó a usarlo nuevamente”.
Además agregó que las imágenes tomadas del ojo izquierdo de Chen mostraron grandes manchas de sangre en su retina, las cuales estaban bloqueando su visión. Le diagnosticaron retinopatía de valsalva que es una hemorragia prerretiniana que se presenta como una pérdida visual aguda sin dolor.
¿Cómo afecto el brillo de su celular en sus ojos?
Según Wangjian, el teléfono de la joven china había emitido 625 lúmenes, más del doble del nivel recomendado que es de 300 lúmenes. La doctora Wangjian dijo que “exponer el ojo por solo dos horas tendría el mismo efecto que ser horneado en un microondas”.