Michael Murrah, de 45 años, presuntamente fue quien apuñaló y mató a su esposa, él ya no vivía con su pareja a quien se le había negado una orden de alejamiento permanente. Al momento de ser capturado confesó que cometió el crimen para lograr “cumplir una profecía”.
Los policías indicaron en los registros judiciales que Michael Murrah, tras ser arrestado, calificó a la víctima como una “bestia estelar” y exclamó que la mató para “cumplir una profecía”.
El sospechoso, con biblia en mano, había llegado la mañana del domingo 7 de noviembre a su antigua casa en Vancouver, en Washington, para enfrentarse con Mónica Murrah (de soltera Morales). Según relató la policía en una declaración jurada de causa probable citada por KOIN-TV.
Mónica estaba divorciándose de Michael, ella había pedido una orden de alejamiento por temor a su vida y la de su hijo de 8 años.
Michael había realizado muchas amenazas de suicidio, de acuerdo con Mónica “Una vez incluso agarró un gran cuchillo y se sentó afuera de nuestro dormitorio amenazando con suicidarse. Estoy aterrorizada de que lo haga, y de que también me mate a mí y a nuestro hijo”, dijo anteriormente a familiares.
Ella había logrado una orden de alejamiento temporal en 2020 cuando Michael la drogó, golpeó y asfixió varias veces, también tratando de asfixiar a su hijo, de 7 años.
Cuando la policía llegó a la casa de los Murrah, Michael sostenía un cuchillo con las manos ensangrentadas, según el periódico The Oregonian. El hijo estaba en casa también, por suerte ileso.
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Mónica tenía “numerosas lesiones en el cuerpo”, incluyendo el cuello, según la declaración jurada. Muriendo en el hospital a causa de sus heridas después.
Michael sostenía que cumplía “una profecía” para matar a una “bestia estelar”. Se enfrenta ahora a un cargo de asesinato en primer grado, con fianza de 2 millones de dólares. Será procesado el 19 de noviembre.