“Me dio un uniforme escolar y me dijo que vaya a tomar el té con Jeffrey Epstein”: testigo en el juicio contra  Ghislaine Maxwell

Ghislaine Maxwell, de 59 años, enfrentó el séptimo día del juicio en su contra por presuntamente facilitar a Jeffrey Epstein menores de edad para explotación sexual. Tres mujeres han testificado en su contra.

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Este boceto de la sala del tribunal muestra a Ghislaine maxwell durante su juicio por cargos de tráfico sexual, en la ciudad de Nueva York, el 1 de diciembre de 2021. Foto / AFP

Por Agencias - X. Alfaro

2021-12-07 6:17:52

En el séptimo día de juicio contra Ghislaine Maxwell, nuevos y reveladores detalles sobre la trama de esta red de abuso sexual liderada por Jeffrey Epstein salen a la luz.

Otra testigo, identificada como "Kate" (seudónimo) narró al juez el papel que Maxwell ocupó durante sus encuentros sexuales con el magnate quien se suicidó mientras estaba recluido en 2019.

"Kate" de origen británico dijo que Maxwell presionó para que le diera mansajes a Epstein cuando ella era menor de edad.

“Me dio un uniforme escolar y me dijo que vaya a tomar el té con Jeffrey Epstein”, narró. Los hechos habría tenido lugar en 1990 en la finca de Epstein en Palm Beach, Florida.

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Jeffrey Epstein y Ghislaine Maxwell participaban en presuntos abusos ocurridos en distintas mansiones en Nuevo México, Palm Beach y Manhattan. Foto: AFP

“Pensé que sería divertido que le llevaras a Jeffrey su té con este traje”,  fueron las palabras que Ghislaine Maxwell habría dicho a "Kate" para su encuentro.

"Kate" fue la segunda testigo en el juicio que se celebra en el tribunal federal de Manhattan, Nueva York. La tercera fue una mujer identificada solo con el seudónimo de "Carolyn", atestiguó que, entre los 14 y 18 años, fue llevada más de 100 veces a la residencia de Epstein en Palm Beach, Florida.

La testigo dijo que usualmente, al final de cada encuentro con Epstein, recibía 300 dólares de parte de Maxwell, quien se declaró "no culpable" de seis cargos en su contra por seducción y transporte de menores con fines sexuales.

"Cada vez sucedía algo sexual", relató "Carolyn" con la voz temblorosa ante el jurado, al admitir también dificultades en el seno de su familia y problemas con drogas.

A mediados de marzo fue subastada la “mansión del terror”, una propiedad de Epstein que era utilizada para organizar fiestas con su círculo de amigos y personas que pertenecían a distintas élites, incluida su novia Ghislaine Maxwell. Foto: AFP / Archivo

La testigo evocó en su declaración una infancia difícil: "Mi madre era alcohólica y adicta a las drogas", añadió.

Al contrario de los dos testimonios previos en el juicio, Carolyn no señaló a Maxwell como la persona que la llevó por primera vez a la casa de Epstein.

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En cambio, señaló a otra mujer que no participa en esta vista judicial, Virginie Giuffre, quien denunció este año en Nueva York al príncipe británico Andrés, conocido de Epstein y de Maxwell, a quien acusa de agresiones sexuales cuando ella era menor de edad hace más de 20 años.

"Virginie me preguntó si yo quería hacer dinero (...) yo iba a encontarme con su amigo rico" para hacerle masajes, declaró.

En la casa de Florida del millonario Epstein los encuentros sexuales se desarrollaban siempre bajo el mismo libreto: "Eramos recibidas por la señora Maxwell, que era mayor (que nosotras), de cabello negro (...) subíamos a la sala de baño" donde había una mesa de masajes, según reveló Carolyn, quien añadió que recordaba que Epstein se cepillaba los dientes antes de encontrarse con ella y con Guiffre.

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Ghislaine Maxwell, de 59 años, una figura muy popular en el jet-set británico, y con triple nacionalidad francesa, británica y estadounidense, comparece ante la justicia desde el 29 de noviembre pasado por facilitar a Epstein menores de edad para explotación sexual. De ser hallada culpable, Maxwell enfrenta una condena efectiva de por vida.