El sábado anterior Babita, de 21 años, y Jaswant Ahirwarm, de 25, una pareja de la India, terminó sorprenda al conocer la condición física de su hijo, los doctores les habían dicho que esperaban un par de gemelos pero nació un bebé con dos cabezas y tres brazos, recogen medios internacionales.
Babita y Jaswant residen en el distrito de Vidisha de Madhya Pradesh, un estado en el centro del país.
En medicina, la condición se conoce como tribrachius parapagus, y ocurre en menos de uno en un millón de nacimientos. Además, se trata de un cuadro que presenta una expectativa de vida muy baja para los bebés, ya que, al compartir sus órganos internos, separarlos quirúrgicamente resulta virtualmente imposible.
“Realmente tuve sentimientos encontrados al verlo. Todo lo que quería era un hijo normal y saludable. No entiendo por qué Dios quiso castigarme de esta forma”, dijo la joven, que en recientes entrevistas a la prensa parece no aceptar la condición de sus bebés y se refiere a ellos como si fueran una sola persona.
De acuerdo con los especialistas, el caso de los siameses indios es tan poco frecuente que ninguno de los médicos que trabajan en el hospital donde nacieron había visto uno similar. Por ese motivo, y debido a su delicado estado de salud, fueron trasladados al Hamidia Medical College and Hospital en la ciudad Bhopal, India.
“Sabemos que es un cuadro complicado, pero estamos ocupándonos de los cuidados de nuestros bebés y vamos a esperar la opinión de los doctores de Bhopal y de Delhi, que en el pasado trataron a chicos con condiciones análogas”, dijo Jaswant, el padre de los siameses.
A diferencia de su esposa, el hombre describió la llegada de sus hijos al mundo como una bendición, y afirmó que su intención es “criarlos tal como son”.