Trump sale de hospital y vuelve a minimizar el riesgo del COVID-19

El doctor del presidente dijo que aún no se encuentra fuera de riesgo tras ser tratado por COVID-19. Mientras, Trump volvió a su estilo despreocupado ante el virus que ha matado a más de 200,000 en su país.

descripción de la imagen
Foto / AFP

Por AFP

2020-10-05 8:50:30

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, salió el lunes por la tarde hospital Walter Reed, donde estuvo siendo tratado por COVID-19, pero su médico dijo que aún no está “completamente fuera de peligro”, cuando falta un mes para las elecciones del 3 de noviembre.

“Saldré del gran Centro Médico Walter Reed hoy (ayer) a las 18H30”, tuiteó Trump, hospitalizado el viernes horas después de anunciar que se había contagiado. “¡Me siento realmente bien!”, “¡mejor que hace 20 años!”, añadió el mandatario de 74 años.

Al volver a la Casa Blanca este lunes por la noche, el presidente se quitó la máscara y levantó el pulgar. Unos minutos antes, de tapaboca y traje y corbata, el mandatario había abandonado caminando el centro médico previo a entrar en un vehículo negro y luego en el Marine One en medio de los gritos de “¡Cuatro años más!, ¡Cuatro años más!” de sus seguidores apostados en la entrada.

VER: Trump dice que “aprendió mucho sobre COVID” y hace breve paseo en auto

“¡Volveremos pronto a la campaña!”, había tuiteado poco antes Trump. “Las noticias falsas solo muestran las encuestas falsas”, dijo.

En la recta final de una tensa campaña electoral en la que aparece rezagado en las encuestas frente a su rival demócrata, Joe Biden, el presidente republicano está ansioso por volver al ruedo.

Especialmente, porque tras su diagnóstico tuvo que cancelar una gira en Florida, un estado que necesita ganar si quiere reelegirse dentro de cuatro semanas.

Un automóvil con el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, pasa junto a sus partidarios en una caravana fuera del Centro Médico Walter Reed en Bethesda, Maryland. Foto / AFP

“No le tengan miedo al COVID19. No dejen que domine su vida”, tuiteó sobre una enfermedad que se ha cobrado la vida de unos 210,000 estadounidenses y provocó un duro golpe a la economía de la primera potencia mundial.

Esto es consistente con su actitud de restarle importancia al virus que ha puesto de rodillas al mundo, algo que ha criticado duramente su rival electoral, el demócrata Joe Biden.

“Que le diga eso a las 205,000 familias que perdieron a alguien”, reaccionó Biden, quien se enfrentó a Trump en un caótico debate televisado el miércoles pasado, dos días antes del diagnóstico positivo de COVID-19 del presidente.

Pese a estas críticas, el mandatario insiste en su tono triunfalista, un pilar clave de su apuesta electoral. “Hemos desarrollado, bajo la Administración Trump, algunos medicamentos y conocimientos realmente excelentes”, aseguró el presidente.

El médico de la Casa Blanca, Sean Conley, dijo en rueda de prensa que el presidente puede seguir su convalecencia en casa, luego de recibir un cóctel agresivo de medicamentos. Sin embargo, el doctor advirtió que no estará “completamente fuera de peligro” hasta dentro de una semana.

TAMBIÉN: Trump “evoluciona bien” del COVID-19 pero “no está fuera de peligro”, dice su médico

“Todos estamos siendo cautelosamente optimistas y en guardia porque nos encontramos en un territorio desconocido cuando se trata de un paciente que recibió las terapias que recibió tan temprano en el curso” de la enfermedad, dijo. Trump ha recibido el esteroide dexametasona, generalmente asociado con casos graves de COVID19, y dos tratamientos experimentales (el de la empresa biotecnológica Regeneron y el antiviral remdesivir).

Además, Conley dijo el domingo que se le dio oxígeno adicional el viernes, algo que inicialmente no revelaron. Pero salir del hospital no supondrá que Trump pueda volver a su rutina anterior de giras y mitines. Y la Casa Blanca, donde su salud será supervisada de cerca las 24 horas del día, no parece ser un lugar libre de coronavirus.

La secretaria de prensa de Trump, Kayleigh McEnany, se convirtió el lunes en el último caso positivo en el círculo cercano del mandatario desde el anuncio el jueves del contagio de la asistente de Trump Hope Hicks, que hizo encender las alarmas.

La lista incluye además a la primera dama, Melania Trump, al gerente de la campaña Trump 2020, Bill Stepien; a la exasesora de Trump Kellyanne Conway; al exgobernador de Nueva Jersey Chris Christie; a la titular del Comité Nacional Republicano, Ronna McDaniel; y a tres senadores republicanos (Mike Lee de Utah, Thom Tillis de Carolina del Norte y Ron Johnson de Wisconsin), así como el ayudante personal de Trump, Nick Luna.