La droga experimental Remdesivir reduce el tiempo de recuperación por COVID-19 en adultos, también produce “acontecimientos adversos graves”, concluyó que la investigación elaborada por The New England Journal of Medicine, NEJM.
La administración de Remdesivir es una terapia experimental que empezó a desarrollarse en 2009 y se puso a prueba con pacientes de ébola a mediados de la década pasada; y recientemente, su uso volvió a ser noticia al ser suministrado al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tras dar positivo a COVID-19.
El estudio de NEJM contó con la participación de mil 62 pacientes positivos a COVID-19, con evidencia de infección del tracto respiratorio inferior, de los cuales 541 fueron tratados con Remdesivir y 521 con placebo.
El placebo es una sustancia inactiva u otra intervención que tienen la misma apariencia y se administran de la misma forma que el medicamento o tratamiento activo que se está probando. Los efectos del medicamento activo u otra intervención se comparan con los efectos del placebo.
Aquellos atendidos con la droga experimental recibieron el primer día una dosis de 200 mg, después tomaron 100 mg diarios durante un máximo de nueve días.
El placebo también fue suministrado durante diez días.
Los resultados arrojaron que con el Remdesivir, los pacientes tuvieron un tiempo promedio de recuperación de 10 días, mientras que con el placebo tardaron 15 días.
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El ensayo clínico también registró “acontecimientos adversos graves” en 131 de los pacientes tratados con la droga experimental y en 163 de los tratados con placebo.
Remdesivir como tratamiento contra COVID-19 en Trump
Estados Unidos autorizó en mayo el uso del Remdesivir para tratar a enfermos de COVID-19, y hace pocos días fue administrada al presidente Trump, luego de que sus prueba resultara positiva y fuera internado en el hospital militar Walter Reed.
El doctor del presidente, Sean Conley, aseguró en rueda de prensa que Trump mantuvo una terapia del antiviral Remdesivir de cinco días y que irían decidiendo sobre la marcha si era necesario más de ese tratamiento.
En aquel momento el mandatario tenía un nivel de saturación de oxígeno en sangre del 96 %, un nivel dentro de los parámetros, según Conley.
Además, Trump recibió una dosis única del cóctel de anticuerpo de Regeneron, dijo Conley. El tratamiento aún está en la etapa de ensayos, pero los reguladores aún no lo han aprobado.
A sus 74 años, Trump tuvo “un mayor riesgo de contraer una enfermedad grave” debido a la COVID-19, según la agencia de salud estadounidense CDC.