Dos enfermeras dirigieron la estafa desde noviembre hasta la fecha, fuera del “Wild Child Pediatric Healthcare” en Amityville, propiedad de DeVuono, según dijo la oficina de distrito de Suffolk a NBC News.
DeVuono y Urrar, enfermeras de 49 y 44 años, están acusadas de vender las tarjetas de vacunación de covid-19 por $220 dólares por las tarjetas falsas para adultos y $85 para las tarjetas infantiles, obteniendo más de $1.5 millones de dólares, mencionó el viernes el Departamento de Policía del Condado Suffolk.
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“Como enfermeras, estas dos personas deben comprender la importancia de las tarjetas de vacunación legítimas mientras todos trabajamos juntos para proteger la salud pública”, dijo el comisionado de policía del condado, Rodney K. Harrison.
Después de vender las tarjetas falsas, las enfermeras ingresaban la información al Sistema de información de inmunización del estado Nueva York (NYSIIS), registrando a personas no vacunadas como si tuvieran las dosis.
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Fueron arrestadas cuando la pareja falsificó tarjetas de vacunación para agentes encubiertos de la policía de Nueva York. Estos descubrieron $900,000 dólares en efectivo en la casa de DeVuono.
Kathy Hochul, gobernadora de Nueva York, decretó en diciembre que producir o usar una tarjeta falsa de vacunación es un delito estatal y federal. Y se podría enjuiciar a los usuarios y proveedores de esos documentos fraudulentos.