Dron de vigilancia no armado del modelo MQ-4 Triton. Foto AFP
El subcomandante de la base de defensa aérea Jatam al Anbia, Qader Rahimí, subrayó que esas advertencias y la ruta de vuelo “están registradas”, según la televisión estatal iraní.
EE.UU. asegura que el dron no violó el espacio aéreo iraní y que fue derribado en aguas internacionales, pero la versión de Irán es diametralmente opuesta.
Rahimí hizo hincapié en que el aparato fue derribado “como resultado de la conducta invasora y la indiferencia de EE.UU. hacia los derechos de otros países”.
En este sentido, precisó que el dron violó las normas internacionales al cruzar las fronteras iraníes y entrar en sus aguas territoriales.
En la misma línea, el ministro iraní de Exteriores, Mohamad Yavad Zarif, insistió hoy en que el aparato despegó de Emiratos Árabes Unidos “en modo oculto y violó el espacio aéreo iraní” al ser dirigido a las coordenadas 25°59’43″N 57°02’25″E, cerca de Kuhe Mobarak.
“Hemos recuperado restos del avión militar estadounidense en NUESTRAS aguas territoriales, donde fue derribado”, escribió Zarif en su cuenta oficial de Twitter.
La misión iraní ante las Naciones Unidas ha entregado ya una carta con información exacta sobre las zonas y las coordenadas a las que llegó el avión no tripulado estadounidense dentro del espacio aéreo iraní.
El texto, que también recoge las repetidas advertencias de radio, destaca que el dron realizó un sobrevuelo en el estrecho de Ormuz hasta el puerto iraní de Chabahar y que “había apagado su equipo de identificación”.
“Aunque la República Islámica de Irán no busca la guerra, se reserva el derecho inherente, en virtud del Artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas, a tomar todas las medidas necesarias contra cualquier acto hostil que viole su territorio, y está decidida a defender su tierra, mar y aire”, agregó.
El aparato es un dron de vigilancia no armado del modelo MQ-4 Triton y fue derribado por un misil tierra-aire del sistema de defensa aérea Jordad 3, diseñado y fabricado en Irán.
El presidente estadounidense, Donald Trump, atribuyó el incidente a “un error” y no a un ataque intencionado de Irán, aunque no descartó que Washington pueda tomar represalias.