El régimen de Nicaragua puso al excomandante sandinista Henry Ruiz, de 81 años, bajo arresto domiciliario en Managua, aseguraron este martes opositores y medios de prensa nicaragüenses editados en el exilio.
Los portales 100% Noticias, Confidencial, Divergentes, Nicaragua Investiga y otros publicaron que las autoridades impusieron el pasado sábado «casa por cárcel» a Ruiz, exministro de Planificación del gobierno de Daniel Ortega en los años 80.
Ortega, quien gobernó tras triunfar la revolución sandinista en 1979, se mantiene en el poder desde 2007 tras tres reelecciones, la última de ellas en 2021 en comicios con la oposición presa o en el exilio, entre ellos muchos antiguos aliados.
Según 100% Noticias, Ruiz, conocido como el «comandante Modesto», seudónimo que usó cuando estuvo en la guerrilla sandinista, se volvió crítico del gobierno tras las protestas de 2018, cuya represión según la ONU dejó más de 300 muertos.
El régimen de Ortega y de su esposa Rosario Murillo, que no se ha referido a la versión de la prensa sobre Ruiz, consideró esas manifestaciones como un intento de golpe de Estado patrocinado por Washington.
El portal Divergentes afirmó que Ruiz «tiene más de una semana rodeado en su vivienda, en la que vive solo». Agregó que intentó salir de la casa el sábado, pero «una docena de policías» se lo impidieron.
El movimiento opositor Unidad Nacional Azul y Blanco, activo desde el exilio, exigió en su cuenta en la red social X la «libertad para todas las personas presas políticas».
El régimen de Ortega ha puesto antes en arresto domiciliario o en prisión a otros líderes históricos de la revolución sandinista que derrocó al dictador Anastasio Somoza.
La excomandante sandinista y exministra de Salud Dora María Téllez estuvo presa casi dos años antes de ser expulsada del país.
En septiembre pasado, el general Humberto Ortega, crítico de su hermano Daniel, falleció a los 77 años en un hospital militar de Managua por un paro cardíaco. Cuatro meses antes, según medios opositores, estuvo en detención domiciliaria.
La custodia policial comenzó después de que el general retirado dijera en una entrevista que su hermano Daniel, de 79 años, carecía de sucesores y su poder no resistiría a su muerte.