Un empleado del Aurora Medical Center, en Wisconsin, Estados Unidos destruyó intencionalmente 500 dosis de la vacuna (se desconoce de qué laboratorio es) contra el covid-19, según lo informó la institución médica.
El Aurora Medical Center detalló a través de un comunicado que el empleado, de quien no se reveló la identidad, retiró premeditadamente las vacunas del refrigerador donde se encontraban almacenadas.
“Estamos más que decepcionados porque las acciones de este individuo provocarán que más de 500 personas sufran un retraso a la hora de recibir su vacuna”, expresó la institución en el comunicado.
La institución informó que el empleado aceptó su error y que tras lo ocurrido el hombre fue despedido.
“Esto ha constituido una violación de nuestros valores fundamentales y el individuo en cuestión ya no trabaja con nosotros”, comunicó el Aurora Medical Center.
Según medios estadounidenses, en las investigaciones preliminares se estableció que se trató de “un error humano”, pero tras las intervención de las autoridades correspondientes, se concluyó que el acto fue premeditado.
Se desconocen las razones por las que el ahora exempleado de Aurora Medical Center destruyó las dosis de la vacuna.
El estado de Wisconsin reporta 3,170 nuevos casos de contagios por covid-19 y solo el miércoles registró 4o muertes por la enfermedad.
Estados Unidos cierra este jueves el año con un récord de hospitalizaciones por la covid-19 y con pronósticos poco alentadores para los primeros meses de 2021, tras la llegada al país de la cepa británica del virus y ante la lentitud en la campaña de vacunación.
Diciembre ha sido el mes del año con más muertos por la pandemia, con varios récords diarios consecutivos que esta semana se han superado día tras día, con un total de 3,744 este miércoles, según el recuento independiente de la Universidad Johns Hopkins.
Y el panorama para enero es aciago: un pronóstico de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC) indica que, en las próximas tres semanas, podrían morir al menos 80,000 estadounidenses más por covid-19.
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La variable que más preocupa a muchos expertos es la presión hospitalaria, el miércoles se alcanzó un nuevo récord en cuanto a hospitalizaciones, con 125,220 pacientes ingresados por la enfermedad, de acuerdo con la plataforma Covid Tracking Project.
Ante ese panorama, muchos estadounidenses se aferran a la esperanza de la vacuna, pero la campaña de inmunización -que comenzó hace dos semanas- ha ido mucho más lenta de lo pronosticado por el Gobierno del presidente saliente, Donald Trump.
Hasta el miércoles menos de 2.8 millones de personas habían recibido la primera dosis de la vacuna, apenas el 14 % de los 20 millones de estadounidenses que el Gobierno planeaba inmunizar antes de que acabara diciembre.