Poco se sabe de las personas que sobreviven al coronavirus COVID-19, ¿Cuántos son?, ¿hay secuelas? son algunas de las interrogantes que comienzan a surgir.
Hasta el momento se sabe que las cifras de ese segmento de la población mundial suman varios miles; mientras, los especialistas sostienen que las eventuales secuelas son difíciles de sobrellevar.
En China que en total ha reportado 81.020 casos confirmados, la cifra de recuperados se eleva a 67.017 por 3.203 muertes. En Irán, con 13.938 casos confirmados, 4.590 se han recuperado. 724 iraníes han muerto.
Italia, uno de los países que mayor atención mediática ha acaparado por ser el segundo país con mayor número de casos confirmados (24.747 al 16 de marzo de 2020), registra 1.809 muertes y 2.335 recuperados.
Con respecto a las eventuales secuelas tras padecer el COVID-19, se debe mencionar que los avances científicos permiten saber muchas cosas sobre cómo actúa la enfermedad en el cuerpo humano, pero aún se desconocen cuáles son las consecuencias a largo plazo para las personas que lo han sufrido.
Por ejemplo, en China, la Autoridad Hospitalaria reportó algunas de las secuelas que viven ciertos pacientes recuperados del coronavirus, entre ellos la falta de capacidad pulmonar.
El doctor Owen Tsang Tak-yin, director médico del Centro de Enfermedades Infecciosas en el Hospital Princess Margaret de Kwai Chung, en Hong Kong, dijo al South China Morning Post que después de monitorear a 12 pacientes dados de alta por COVID-19, tres de ellos no pudieron realizar sus actividades como antes.
Tsang explicó que sienten falta de aire al caminar más rápido de lo normal, e incluso han experimentado una caída de entre 20 y 30 por ciento en su función pulmonar.
De hecho, nueve de esos pacientes monitoreados fueron sometidos a escáneres pulmonares y los médicos encontraron que sus pulmones tienen apariencia de vidrio esmerilado, condición que sugiere un daño en esos órganos.
A largo plazo, todavía se desconocen los efectos del coronavirus y si estos rasgos detectados hasta ahora producirán una fibrosis pulmonar en la que el tejido de los órganos se endurece y no funciona correctamente.
Los médicos están recomendando a estos pacientes realizar actividades cardiovasculares como natación o marcha suave, para que recuperen capacidad pulmonar gradualmente, pero ignoran las consecuencias certeras de haber padecido COVID-19.