Washington quiere comprar un hotel para convertirlo en hospital por el coronavirus

Hasta la tarde del lunes, más de 90.000 personas se han infectado en todo el mundo y 3.100 fallecieron a consecuencia del virus.

descripción de la imagen
Aeropuerto de Los Ángeles, EE. UU. Foto AFP

Por Agencias-C.Fuentes

2020-03-03 8:01:48

Los seis fallecidos por COVID-19, la enfermedad causada por el virus, en Estados Unidos estuvieron en el estado de Washington, y Dow Constantine, máximo responsable polí­tico dijo que su condado estaba comprando un hotel para convertirlo en hospital para pacientes aislados.

Hemos avanzado a un nuevo escenario en la lucha, señaló Constantine sobre en el manejo del brote de coronavirus.

Dow Constantine, máximo responsable polí­tico del condado
Dow Constantine, máximo responsable polí­tico del condado. Foto EFE

Ahondó que el hotel “debería estar disponible a finales de semana. La vivienda modular también se instalará alrededor de King Co”.

En Estados Unidos, los pacientes infectados con COVID-19 sobrepasaron los 100 en al menos 11 estados. El presidente, Donald Trump, y su gobierno se reunieron con ejecutivos de la industria farmacéutica el lunes para discutir cómo de rápida podrí­a ser la búsqueda de una vacuna.

Brote de coronavirus en el mundo

Los brotes en Corea del Sur, Italia, Irán y Japón son la mayor preocupación de la Organización Mundial de la Salud (OMS), dijo su presidente Tedros Adhanom Ghebreyesus. El virus tiene una capacidad única de transmisión comunitaria, pero podrí­a ser contenido con las medidas adecuadas, apuntó.

Estamos en territorio inexplorado, agregó Tedros.

Corea del Sur registró su mayor incremento de casos diario, con 851 nuevos pacientes, en su mayorí­a dentro y en los alrededores de la ciudad suroriental de Daegu, donde hay un brote infeccioso ligado a una iglesia local. En total, 5.186 personas dieron positivo por COVID-19 en todo el paí­s.

Trabajadores con trajes especiales para evitar el contagio del coronavirus durante los trabajos de limpieza del metro de Seúl (Corea del Sur). Foto EDH/ AFP

En la capital, Seúl, comenzaron a operar centros en los que la población puede someterse a las pruebas del virus sin salir del auto. Allí­, los trabajadores, vestidos con trajes de protección blancos de pies a cabeza, se inclinaban sobre los vehí­culos con hisopos bucales, una medida que busca limitar el contacto con posibles portadores de la enfermedad. Los soldados se desplegaron por toda la ciudad para rociar calles y callejones con desinfectante.

El número de ví­ctimas mortales en el paí­s aumentó a 28, y el presidente, Moon Jae-in, quien calificó el brote de una grave situación, apuntó que su gobierno presionará para inyectar más de 30 billones de wones (25.000 millones de dólares) para financiar clí­nicas, ayudar a pequeños negocios y otras medidas relacionadas con el virus. Esta iniciativa necesita la aprobación del parlamento.

En China, el conteo de nuevos casos volvió a bajar el martes, con apenas 125 nuevos contagios, la cifra más baja en seis semanas. Pero el gigante asiático sigue siendo de lejos la nación más afectada, con un total de 80.151 enfermos y 2.943 muertos. El virus se ha detectado en al menos 70 paí­ses con 90.000 casos y 3.100 ví­ctimas mortales.

El embajador de China en Naciones Unidas dijo que el paí­s estaba ganando su batalla contra el COVID-19.

No estamos lejos de la victoria, declaró Zhang Jun.

En Irán, tras restar importancia al brote la semana pasada, la preocupación se extiende al liderazgo del paí­s y algunos de sus miembros contrajeron el coronavirus. El lí­der supremo de la República Islámica, el ayatolá Ali Jamenei, llevaba guantes desechables durante un acto en el que plantó un árbol por el Dí­a del Árbol, que se celebrará pronto.

“Todo lo que ayude a la salud pública e impida la expansión de la enfermedad es bueno, y lo que ayude a extenderla es pecado”, dijo Jamenei el martes.

En Italia, el número de casos positivos siguió subiendo hasta los 2.036 y las autoridades explicaron que podrí­an tardar hasta dos semanas en saber si las medidas adoptadas, incluyendo la cuarentena decretada en 11 poblaciones del norte, estaban funcionando.

Más de 90.000 personas se han infectado en todo el mundo y 3.100 fallecieron a consecuencia del virus.

La enfermedad está presente ya en al menos 70 naciones. Ucrania fue la última en unirse a la lista al reportar su primer caso.