La región metropolitana de Sao Luis, capital del estado brasileño de Maranhao (nordeste), inició este martes el confinamiento total adoptado para contener el avance del coronavirus SARS-CoV-2 después del creciente aumento del número de casos, que en esa región llegó el lunes a 4,530 contagios y 271 muertes.
Una determinación judicial aprobó el pasado jueves las rígidas medidas y restricciones que entraron en vigor este martes y pueden ser adoptadas por otras regiones en las que el coronavirus viene avanzando con más fuerza que en el resto del país suramericano, que ya contabiliza más de 7,300 muertos y 107,000 contagiados.
Las autoridades de Maranhao establecieron desde las primeras horas de este martes cincuenta puntos de fiscalización y control y otros treinta de bloqueo policial en Sao Luis y los municipios vecinos de Paço do Lumiar, Sao José de Ribamar y Raposa, con advertencias y multas para los que incumplan las restricciones.
En un mensaje en su perfil de Twitter, el gobernador de Maranhao, Flavio Dino, destacó “la buena adhesión de la población a las medidas preventivas adicionales que implantamos hoy en la Isla de Sao Luis”.
“Al final del día haremos una evaluación más detallada, pero vale la pena el esfuerzo para que podamos volver a la normalidad cuanto antes”, subrayó el único gobernador del Partido Comunista de Brasil (PCdoB).
El llamado ‘lockdown’ (confinamiento total) fue establecido después del resultado de un estudio de la Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz) que apuntó a Maranhao, con su capital Sao Luis como epicentro, como el estado con mayor ritmo de crecimiento del patógeno causante de la enfermedad del COVID-19.
Las medidas hacen más severos los controles que ya existían en supermercados, bancos, farmacias y otros servicios esenciales y prohíben en la región metropolitana la entrada y salida durante diez días de vehículos, excepto las ambulancias y los camiones de abastecimiento.
El uso de mascarillas también se tornó obligatorio en toda la ciudad.
Sao Luis es la primera ciudad en imponer ese tipo de medidas severas en el país, aunque ya se venían implementando otras cuarentenas un poco más flexiblea.
La crítica situación que se registra en otras regiones del país ha llevado a que los gobiernos de Río de Janeiro, del estado amazónico de Pará y de los estados de Pernambuco y Ceará, también estén pensando en poner en marcha esta medida.