VIDEO: Este podría ser el animal que transmitió el COVID-19 al ser humano

Estudios han demostrado que es portador de coronavirus similar al de la pandemia actual.

El pangolín, un pequeño mamífero conocido por sus escamas y amenazado de extinción, podría ser un animal clave en la transmisión al hombre del nuevo coronavirus, que ya ha provocado la muerte de más de 600 personas en China.

Por N. Hernández / Agencias

2020-03-31 1:26:56

Los pangolines son portadores de un coronavirus estrechamente relacionados con el SARS – CoV-2, causante de la actual pandemia, el vínculo no es lo suficientemente sólido como para concluir que estos animales son los responsables directos de haber transmitido el virus a los humanos.

Se sabe que el COVID-19 nació en un mercado de Wuhan, China, en el que se vendían animales salvajes para el consumo humano y aunque hay pruebas que sugieren que los murciélagos son el reservorio del SARS-CoV-2, a día de hoy los científicos siguen sin determinar qué animal pudo ser el huésped intermedio que facilitó la transmisión del virus a los humanos.

Ahora, un estudio genómico, liderado por los virólogos chinos Yi Gaun, de la Universidad de Hong Kong y Yan-Ling Hu, de la Universidad de Medicina de Guangxi y publicado recientemente en la revista Nature, dice que los pangolines malayos (Manis javanica) son portadores de coronavirus relacionados con el SARS-CoV-2.

Sin embargo, el parecido entre estos coronavirus y el que ha causado la pandemia no es suficiente para confirmar que estos animales son los huéspedes que transmitieron el actual brote de COVID-19 desde los murciélagos a los humanos, pero los hallazgos sugieren que estos mamíferos salvajes “son un segundo huésped de los coronavirus”, por lo que su venta en los mercados debería estar estrictamente prohibida para evitar futuras transmisiones, según los científicos.

El estudio también hace énfasis en que después de iniciarse el brote, el mercado de Wuhan fue desmantelado y esto impidió buscar la especie animal de la que surgió el virus.

Sugiere que el posible huésped podría ser el pangolín, el mamífero con el que más se trafica ilegalmente y que se utiliza como alimento y en medicina tradicional china.

Para el estudio, Yi Guan y sus colegas analizaron muestras de 18 pangolines malayos incautados en operaciones de lucha contra el contrabando en el sur de China entre agosto de 2017 y enero de 2018, y en todos ellos encontraron distintos tipos de coronavirus.

Los virus de estas muestras tenían una similitud genética de entre el 85 y el 92 % con el SARS-CoV-2; además, en uno de estos virus, la región que facilita su entrada en la célula es muy similar a la del virus actual.

No obstante, ninguno de los coronavirus de pangolín tenía la alteración específica del SARS-CoV-2 humano, lo que pone en duda que los pangolines sean responsables directos en la transmisión del coronavirus a los humanos.

El mamífero es portador de varios coronavirus similares al COVID-19. Foto/ Pixabay

Aún así, los autores del estudio advierten de que los pangolines no deberían venderse en mercados y proponen una mayor vigilancia de estos animales para comprender su papel en la aparición de coronavirus con potencial para infectar a los seres humanos.

También, investigadores de la universidad de Agricultura del Sur de China identificaron a este pequeño mamífero como un posible “huesped intermedio”.

Un animal que alberga el virus sin estar enfermo y puede transmitirlo a otras especies se llama reservorio, en el caso del nuevo coronavirus es el murciélago.

Según un estudio reciente, los genomas de este virus y los que circulan en este mamífero alado son idénticos en un 96 %.

Pero el virus del murciélago no puede fijarse en los humanos receptores y debe pasar por otra especie para adaptarse a ellos, lo que se llama “huésped intermedio”.

Tras realizar estudios de 1,000 muestras de animales salvajes, los científicos determinaron que los genomas de las secuencias de virus estudiadas en el pangolín eran en un 99% idénticos a los de los pacientes infectados por el coronavirus de la ciudad de Wuhan.

Este nuevo virus apareció en diciembre en un mercado de la ciudad china, en el centro del país, donde se venden muchos animales, algunos de ellos salvajes.

Durante algún tiempo se pensó que el huésped intermedio pudo ser una serpiente, pero después la hipótesis se descartó.

La carne del pangolín es muy apreciada por los sibaritas chinos y vietnamitas y sus escamas, huesos y órganos son usados en la medicina tradicional asiática.

El mamífero fue introducido en 2016 en la lista que prohíbe su comercialización, sin embargo cada año se comercian ilegalmente en Asia y África 100,000 pangolines.