El caos se apodera de las calles de Chile, justo en el segundo aniversario del estallido social este lunes 18 se convocaron más de 50 marchas en diferentes puntos del país, así como se registraron disturbios, saqueos, fogatas en la vía pública, enfrentamientos e incluso la suspensión del transporte colectivo.
Se registraron incidentes aislados con personas encapuchadas que hicieron uso de la violencia durante las concentraciones, miles de personas caminaron hacia la céntrica Plaza Italia, que fue bautizada como plaza Dignidad por los manifestantes, donde dos años atrás se registró el estallido social en octubre de 2019 que dejó más de 30 muertos.
Las tiendas y oficinas de calles principales y por donde los manifestantes iban a pasar habían bloqueado sus entradas con vallas de metal, medios locales señalaron que dos líneas del metro habían sido suspendidas.
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Dos años antes se habían vivido escenas similares protagonizadas en su mayoría por jóvenes en contra del gobierno de Sebastián Piñera, a su paso por el frente del presidencial Palacio de La Moneda, que se encuentra a dos kilómetros de Plaza Italia.
Durante la marcha personas encapuchadas habrían quemado barricadas, según medios locales las fuerzas especiales de la policía reaccionaron ante esto tratando de dispersar a los manifestantes con gases lacrimógenos y camiones lanza agua, según periodistas de AFP.
Entre los negocios saqueados por los manifestantes se encontraba un restaurante de comida rápida ubicado en el centro de la capital.
En el llamado “estallido social” de 2019 ante la redacción de una nueva Constitución considerada injusta ante la mayoría de los 19 millones de chilenos que salieron a las calles a luchar por un “nuevo pacto social”.
Las protestas duraron aproximadamente cuatro meses hasta la llegada de la pandemia en marzo de 2020, se estima que 34 personas perdieron la vida en dicho movimiento social y más de 460 sufrieron lesiones oculares por la intervención de las autoridades.
Ante la violenta represión por parte del Gobierno surgieron acusaciones internacionales de violación a los derechos humanos en el mandato de Piñera.
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