Esta mañana de jueves el presidente Joe Biden, confirmó que el líder del grupo Estado Islámico (EI), había muerto durante una incursión de las fuerzas de Estados Unidos en territorio de Siria.
“Gracias a la habilidad y valentía de nuestras Fuerzas Armadas, hemos sacado del campo de batalla a Abu Ibrahim al-Hashimi al-Qurashi, el líder de ISIS (acrónimo del EI en inglés)”, amplió Biden a través de un comunicado.
Un alto funcionario estadounidense señaló que el líder del Estado Islámico había activado una bomba que cargaba oculta en su cuerpo, haciéndola estallar de forma simultánea mientras se realizaba la estrategia militar.
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Las fuerzas especiales de Estados Unidos se encontraban ejecutando una operación para capturar a yihadistas, dicha estrategia dejo como resultado 13 muertos entre ellos siete civiles indicó una ONG a la agencia de noticias AFP.
El equipo de militares aterrizó en un helicóptero cerca de campamentos de desplazados en la ciudad de Atme, de la región de Idlib, que actualmente se encuentra bajo el control de grupos yihadistas y rebeldes, señaló el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH), que cuenta con una amplia red de fuentes en Siria.
"Las fuerzas especiales estadounidenses bajo la dirección del Mando Central de Estados Unidos (que gestiona las operaciones en la región) llevaron a cabo una misión antiterrorista durante la noche en el noroeste de Siria", señaló el Pentágono en un comunicado.
Y concretó "La misión fue un éxito. No hubo víctimas entre las fuerzas estadounidenses".