Argentina inicia juicio a curas por supuestos abusos

Los imputados están acusados de 28 delitos cometidos contra 11 menores.

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Lupillo Rivera (izq.) es un cantante del género regional mexicano, y Belinda es una estrella pop. / Foto Por EDH-AFP

Por AP

2019-08-05 4:50:28

Sentado en una silla de ruedas y con gesto abatido el cura italiano Nicola Corradi parece un anciano inofensivo. Pero según exalumnos de un instituto para sordos argentino fue quien les causó durante años un sufrimiento indescriptible? mediante supuestos abusos sexuales por los que deberá responder en un juicio histórico que comenzó el lunes en la provincia de Mendoza.

De brazos cruzados y con la mirada apuntando al suelo, Corradi, de 83 años, fue trasladado por un pasillo por una integrante del personal penitenciario a la sala donde lo esperaba el tribunal integrado por tres jueces. Detrás lo seguí­an esposados y con gesto serio el también imputado sacerdote argentino Horacio Corbacho y el laico de la misma nacionalidad Armando Gómez, custodiados por guardias y bajo los flashes de las cámaras fotográficas de decenas de reporteros.

Los tres están acusados de 28 abusos a exalumnos del Instituto Antonio Próvolo para niños sordos y con problemas de audición de la localidad mendocina de Luján de Cuyo, a unos 1.100 kilómetros al oeste de Buenos Aires.

Mientras los imputados enfrentaban al tribunal sentados juntos en la sala, en la entrada del Palacio de Justicia de la capital mendocina presuntas ví­ctimas y sus familiares colocaron carteles en los que se leí­a Apoyo a sobrevivientes del Próvolo. Con nuestras manos y nuestras voces rompemos el silencio y las imágenes de los acusados.

Estoy súper nerviosa, ansiosa y espero justicia, que esto termine pronto para que mi hijo pueda pasar a una nueva etapa porque esto es muy duro estaba muy ansioso esta mañana?, dijo a The Associated Press Natalia Villalonga. Los supuestos hechos de abuso que su hijo Ezequiel Villalonga, de 18 años, sufrió en el instituto serán juzgados en un proceso que está previsto que dure más de un mes.

La mujer afirmó que espera que los acusados sean condenados a prisión perpetua. Por mí­ que hagan como en Estados Unidos, ¡que los maten!?, enfatizó.

Villalonga es uno de los cerca de 20 exalumnos del instituto católico que fueron presuntamente ví­ctimas de abusos entre 2004 y 2016, incluyendo violaciones, un caso sobre el cual el papa Francisco -de origen argentino- no ha hecho comentarios públicos.

En este primer proceso judicial de una serie que afrontarán otros exintegrantes del colegio -entre ellos dos monjas- los imputados están acusados de 28 delitos cometidos contra 11 menores que contemplan penas de hasta 20 o 50 años de prisión, según los casos, indicaron la querella y la fiscalí­a. Corbacho se ha proclamado inocente y los otros dos imputados se han negado a declarar.

En la primera audiencia a puertas cerradas que duró unas dos horas se leyeron las acusaciones y la defensa de los imputados requirió que las presuntas ví­ctimas declaren durante el juicio, algo que no desean la querella y la fiscalí­a puesto que ya lo hicieron y, según apuntaron a periodistas, serí­a someter de nuevo a los jóvenes a un gran sufrimiento. Los jueces tendrán resolver sobre el pedido de la defensa el martes.

Los delitos que se imputan son, entre otros, abuso sexual con acceso carnal, abuso mediante manoseos y corrupción de menores, ya que los menores supuestamente fueron obligados a ver pornografí­a y a cometer abusos entre ellos.

Los sordos que dicen haber sufrido todo tipo de vejámenes se sienten por primera vez fuertes y poderosos luego de años de sufrimiento bajo lo que describieron como el dominio de los clérigos. Los del Próvolo de Mendoza dijimos ya no más miedo. Tení­amos el poder, dijo a AP antes del juicio Ezequiel Villalonga, quien accedió a dar a conocer su identidad completa -algo que la mayorí­a de las ví­ctimas rehúsa hacer-.

Las denuncias salieron a la luz a fines de 2016 y generaron un escándalo mayúsculo que se intensificó luego de saberse que Corradi ya habí­a sido señalado por delitos similares en el Instituto Antonio Próvolo de Verona y que el papa habí­a sido notificado que el religioso dirigí­a un centro similar en Argentina.