Ben Hedges, de 8 años, evitó que él y su madre murieran en un terrible accidente en una transcurrida autopista del Reino Unido. Ben iba en el carro sentado junto a su madre Lauren Smith, de 27 años, cuando ella convulsionó y quedó inconsciente.
Lauren iba manejando sobre la autopista A 120, cerca de Colchester en el condado de Essex, manejaba a más de 100 kilómetros por hora cuando empezó a sentirse mal. Asegura que todo ocurrió tan rápido que no tuvo tiempo de reaccionar y perdió el control del vehículo. Ella estaba sufriendo por primera vez una convulsión.
En ese momento el carro topó el borde de la carretera y fue cuando Ben reaccionó. Saltó al asiento de su madre, encendió las luces de emergencias y tomó el volante hasta dirigirlo a un costado de la autopista donde lo pudo detener.
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Su estado de salud es crítico, según los médicos.
Después, desde el celular de su madre intentó llamar a los paramédicos, pero por fortuna un vehículo se detuvo y los auxilió.
Lauren fue trasladada a un centro hospitalario, era la primera vez que ella tenía una convulsión. Su hijo y los socorristas tuvieron que contarle qué había pasado porque no recordaba nada.
“Cuando empecé a tener la convulsión al principio, agarré el volante y me dirigí de forma errática, por eso nos movimos del carril izquierdo a la reserva central y chocamos contra eso. (…) Ben puso las luces de emergencia y nos dirigió hacia el hombro donde continuamos hasta que el auto se detuvo”, contó a la BBC.