Resignado a la pérdida de la hegemonía de su partido en Washington tras las elecciones de mitad de periodo del martes, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, contempló la posibilidad de investigaciones interminables en la Cámara de Representantes, políticas frustradas y nuevas dudas sobre la resistencia su poco ortodoxa coalición política. El dirigente celebró el éxito de los republicanos para retener el control del Senado y se distanció de cualquier responsabilidad.
Trump permaneció en silencio durante gran parte de una noche electoral en la que su partido conservó el dominio en el Senado y los demócratas se hicieron con el control de la Cámara Baja, un cambio que casi seguro redefinirá su presidencia. A última hora de la noche, publicó un escueto tuit: “Tremendo éxito esta noche. ¡Gracias a todos!”.
Horas más tarde, el mandatario escribió: “¡Ahora podemos volver al trabajo y hacer cosas!”.
Trump telefoneó a la líder demócrata en la Cámara, Nancy Pelosi, una conversación que, según su oficina, incluyó una felicitación y un guiño a su apuesta por el bipartidismo.
Estados Unidos vive su fiesta electoral de las elecciones intermedias
Las elecciones intermedias de Estados Unidos están programadas para mañana pero en algunos colegios de votación anticipada ya se vive la fiesta electoral. Los resultados de estas elecciones marcaran el rumbo de lo que resta del mandato del presidente Donald Trump.
Consideradas ampliamente como un referéndum a la presidencia de Trump, las elecciones del martes arrojaron un resultado dividido que reveló profundas tensiones entre el electorado estadounidense, un distanciamiento que podría aumentar fácilmente en dos años de reparto de poder. La agresiva campaña de Trump, que surtió efecto en algunas victorias clave, sugiere que el mandatario seguirá confiando en la confrontación.
La victoria demócrata en la Cámara les da capacidad de iniciar investigaciones contra el presidente y obstaculizar su agenda.