Judy Cochran, de 73 años, es alcaldesa de Livingston, Texas, y ha sido considerada la abuelita más ruda, esto por haber matado a un caimán de 4 metros y 263 kilos de peso.
El caimán vivía en un pantano que está dentro de la granja familiar, situada en Goodrich. Según medios locales, el animal había asechado a la familia por años e incluso ellos aseguran que el reptil se habría comido uno de los ponis que tenían en la propiedad.
“Creemos que es el caimán que se comió uno de nuestros ponis, podría habérselo comido fácilmente. Por lo general, los caimanes no nos molestan, pero a este lo hemos estado buscando bastante tiempo”, dijo Cochran.
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Ella justificó el hecho, diciendo que se había tratado de una caza ética y dentro de la ley.
“Hay muchos requisitos para matar a un caimán en el condado de Polk. Somos uno de los doce condados que tiene temporada de caza para caimanes, entre el 10 y el 30 de septiembre. Se debe de tener permiso y tiquetas de un biólogo de vida silvestre, y primero hay que atraparlo con un gancho. No vamos simplemente al rancho y cazamos al caimán”, explicó.
Cochran mató al reptil con un disparo, esto habla de su buena puntería. Pero este, no es el primer caimán que muere en la propiedad, ya que en 2009 uno de sus nietos, que en esa época tenía 5 años, mató a otro reptil.
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El insólito hecho ocurrió en Florida, EE.UU., según las autoridades el reptil medía unos 3 metros de largo.
La fotografía de la alcaldesa con el animal fue publicada en las redes sociales de ABC 13 Eyewitness News Houston y se rivalizaron inmediatamente.
