FOTOS: Las cuevas por explorar en San Ignacio, Chalatenango Son poco conocidas por los capitalinos, pero en San Ignacio, Chalatenango todos saben de estas cuevas que vale la pena visitar. Por René Quintanilla, Mauricio Cáceres 2018-09-23 11:23:50 Vista panorámica de las montañas de Chalatenango y el camino hacía las cuevas del chaguiton o del partideño del cantón El Carmen, San Ignacio. Foto EDH/René Quintanilla Las cuevas de Chaguiton o de el Partideño son una alternativa para los turistas que gustan de las caminatas por las montañas y el contacto con la naturaleza. EDH/Mauricio Cáceres El Caserío El Chagüitón está compuesto por unas 50 viviendas dispersas en toda la montaña, una alejada de otra a veces hasta por dos kilómetros de distancia y se conectan por senderos y calles en muy mal estado; ahí se vive de la agricultura. Foto EDH/René Quintanilla Por el sendero se encuentran riachuelos y pozas creados por el agua que emana de la montaña, sobre todo en la época de invierno. Foto EDH/Mauricio Cáceres También se pueden dar un chapuzón en las pozas del río La Palma, sobre todo en época seca, cuando el agua está cristalina. Foto EDH/Mauricio Cáceres Foto EDH/René Quintanilla Cruz Chávez invita a los amantes de la naturaleza a conocer el lugar y los guiará por todas las cuevas con una visita dura la mitad de un día. Foto EDH/Mauricio Cáceres Se recomienda llevar zapatos para montaña, repelente para zancudos, ropa cómoda, lámpara, gorra, lentes transparentes y su propia comida. Foto EDH/René Quintanilla En las cuevas viven colonias de murciélagos, un factor a tomar en cuenta por las personas que tienen fobia a estos mamíferos voladores. Foto EDH/René Quintanilla Las cuevas están formadas por una serie de galerías estrechas y de distinta longitud que recorren el interior de un acantilado de roca caliza. Foto EDH/René Quintanilla Algunas son tan largas y estrechas que nadie ha entrado para encontrar el final. Foto EDH/Mauricio Cáceres Tiene entradas por distintos lados de la montaña y el guía Cruz Chávez, un habitante de la zona, las conoce muy bien como la palma de su mano. Foto EDH/Mauricio Cáceres Algunos petrograbados se encuentran en las paredes de las cuevas. Foto EDH/Mauricio Cáceres Se les conoce como la cueva de El Partideño porque, según la leyenda, se cree que fue el refugio de un personaje conocido como el Indio Cuto Partideño, que era algo como Robin Hood chalateco. Foto EDH/Mauricio Cáceres Cruz Chávez cuenta otra historia fantástica que le contó su ya fallecido padre. Resulta que este quedó un día atrapado en medio de una tormenta mientras trabajaba en su milpa y decidió buscar refugio en las cuevas. Estando ahí escuchó al interior un sonoro rugido, como el de un león. Foto EDH/Mauricio Cáceres El costo del servicio de guía queda a la voluntad de los visitantes. Foto EDH/Mauricio Cáceres Una siesta para reponer energías dentro de una formación rocosa en las cuevas. Foto EDH/René Quintanilla