El significado de los tatuajes de algunas personalidades del deporte
La fecha de un hijo que nació. Un símbolo que recuerda a un ser querido que murió. Una imagen que representa esperanza, alegría, reflexión... eso y más compartieron estos tres personajes del mundo deportivo de El Salvador, quienes aceptaron conversar con El Diario de Hoy sobre las imágenes en sus cuerpos y qué significan para ellos.
La presentadora de Tigo Sports, de 23 años, se hizo su primer tatuaje a los 19 y compartió qué significa para ella cada uno. Atrapasueños Es un objeto étnico formado por un aro, una tela al medio y ataviado por plumas y cuentas. Linda lo adornó con una frase en inglés, que significa: “El miedo termina donde comienza la fe”, y ella agregó que “los atrapasueños solo permiten pasar los sueños buenos, cuelan todo lo malo”.
Flecha en su espalda “La flecha tiene también adentro una flor de loto, para atracción de buenas cosas; y una cruz, por mi apellido. La flecha… porque para la vida solo hay que ir para atrás para agarrar impulso. Cada pétalo de la flor de loto representa alguien de mi familia”. Foto EDH/Roberto Molina
Costado izquierdo Se trata de la frase “Emancipate yourself from mental slavery”. Para Linda, “hay que poder emancipar el poder de la mente, no hay que dejar que la mente te domine, tú eres más fuerte que los malos pensamientos y todo lo negativo”. Foto EDH/Roberto Molina
Dos en su muñeca Linda se tatuó aquí un corazón de diamante (“tenés que cuidar tu corazón, pero a la vez es el punto más fuerte en tu vida”, dijo); y también la frase “Tudo passa”, en portugués. Foto EDH/Roberto Molina
La mano de Hamsa También conocido como “Mano de Fátima”, es un símbolo multicultural presente entre árabes y judíos. Es una mano con los tres dedos medios extendidos y los laterales abiertos, más un ojo al centro. En general, sirve para proteger del mal de ojo y de la envidia. Foto EDH/Roberto Molina
Su primer tatuaje “Fue cuando tenía unos 19 años, es el corazón, la cruz y el infinito, que para mí significa ‘el amor de Dios es infinito’. Yo quería hacerme un tatuaje pero no me decidía, quería algo que fuera el centro de mi vida”. Está en la zona central de su cintura derecha. Foto EDH/Roberto Molina
El volante de Limeño explicó los distintos homenajes y mensajes que guarda en los 12 tatuajes que tiene en su cuerpo. Foto EDH/ Roberto Molina
Hay personas que relacionan la tinta en la piel con algo negativo, pero tres personajes del deporte nacional rompen esa idea al mostrar, con orgullo, sus tatuajes. Foto EDH/ Roberto Molina
Familia y homenajes La pierna izquierda de Rudy incluye distintos momentos de su familia (los nombres de sus hijos Santiago y Alessandro), así como imágenes para rendir honores (como las rosas para personas que murieron de cáncer, o el avión por el accidente del Chapecoense). Foto EDH/ Roberto Molina
“Para mí es un arte, el tatuaje es como una manera de guardar en el cuerpo algo que es muy valioso, que tiene un significado especial para cada uno de nosotros”, explica el futbolista. Foto EDH/ Roberto Molina
La pareja “Cada animal tiene una diferente personalidad. Con todas mis personalidades, con la diferencia de carácter, el mal genio por ratos, siempre hay una dama que lo pone quieto a uno”, comenta entre risas Rudy, y por eso estampó esta imagen alusiva a su esposa. Foto EDH/ Roberto Molina
El primero a sus 18 años, en su abdomen se hizo el 7 y un trébol, como símbolo de suerte cuando ocupara ese dorsal en el fútbol; y los nombres de su abuela María, con la que se crió; y su abuelo José. Foto EDH/ Roberto Molina
Animales en brazo derecho Para Rudy, son rasgos de su propia personalidad: “El oso es fuerza, el gorila es fortaleza; el lobo es como el líder de la manada, y siempre intento serlo. El león con cachorro es por sabiduría, lo tomé como yo y mi hijo, el menor, Santiago. El mapache me gusta por su ingenuidad, picardía, y me gusta Rocket de Guardianes de la Galaxia. Hay un brazalete con una pareja en un bosque. La pareja es alusiva a mi esposa y a mí”, y este último es el más reciente que se ha hecho. Foto EDH/ Roberto Molina
El voleibolista David Vargas (38 años) es seleccionado de “beach volley”, tiene una escuela de este deporte y también modela y hace comerciales para TV; pero explica que en ciertos momentos de su vida ha sufrido discriminación por sus tatuajes. Aun así, considera que “es un arte” que no debe relacionarse con delincuencia, y ya tiene pensado el próximo: un león, un David o un Goliat, y la pelota de voleibol con la que jugó un Mundial en 2015. Fotos EDH/ Josué Parada
Su compañero En la parte interna de su antebrazo izquierdo se tatuó un nombre: Carlos Leiva. Se trata del también seleccionado de voleibol de playa, quien falleció en 2012 mientras entrenaba, junto a David, en el gimnasio de este deporte, en la colonia Flor Blanca. “Pepe” recuerda la angustia que sintió en ese momento, cuando vio que Leiva se desplomó de repente en la arena. Intentó reanimarlo, le dio incluso respiración de boca a boca; pero, ya en camino al hospital, Carlos expiró. Ese último aliento impactó en el antebrazo de Vargas. Y ahí decidió inmortalizar en tinta el nombre de su amigo y compañero, quien falleció debido a una falla cardíaca. Foto EDH/René Estrada
Tribal maorí neocelandés Fue el primero que se hizo, en un proceso que inició en 1996. Abarca desde su antebrazo hasta la muñeca. En la parte de arriba hay unas estrellas que significan, para David, su esposa y sus dos hijos. Foto EDH/René Estrada
Payaso en espalda “Me gustó el dibujo, era de una banda que ya no existe, era como una familia de payasos. Siempre me han gustado mucho, algunos que se miran malos, otros que no. Me llaman la atención, y normalmente soy un payaso“, explica entre risas sobre este tatuaje, el cual se hizo en 1997. Foto EDH/René Estrada
Su hermano David tiene en su brazo izquierdo un tatuaje con la imagen de su hermano Hugo, asesinado en el Barrio Santa Anita en 2014, en el centro de San Salvador. Es una imagen de amor para su hermano, homenaje a quien en vida era un artista del tatuaje. Foto EDH/René Estrada
