“Sugar Daddy” se ha convertido es uno de los términos más usados en el último año. Ese hombre exitoso y adinerado que busca una compañera más joven para un tipo de relación basada en un acuerdo. Qué tipo de arreglo es el que se lleva a cabo, es un tema que depende enteramente de lo que buscan ambas partes; sin embargo, en la mayoría de los casos se pacta un apoyo económico a cambio de una relación que puede ir más allá de lo pasajero.
Los hombres que se inclinan por este estilo de vida suelen ser atractivos, pero sentirse solos o simplemente no han tenido suerte en sus relaciones. Otros pretenden salir de la rutina y comenzar una nueva aventura llena de fuerza, energía y rebeldía, que no conlleve presiones. Solo, un porcentaje muy bajo es el que busca encontrar el “amor verdadero”.
Aunque se trata de un panorama bastante prometedor, también conlleva riesgos. De acuerdo con información publicada por el medio internacional La Nación, en su portal "La Teja", la frustración de no poder hacer pública una violación, por miedo a perder la relación por conveniencia, es solo una de las situaciones que puede llegar a vivir una mujer con un “Sugar Daddy”.
Pero, ¿cómo es vivir teniendo un “Sugar Daddy”?
El referido portal, se dio a la tarea de buscar a alguien que tuviera una relación de ese tipo y retomó el caso de “Sofía” (nombre ficticio seguridad). La historia acapara la atención en redes sociales y ha sido retomado por varios medios de comunicación a escala internacional.
Ella accedió a contar su historia y le confesó al prestigioso medio que no ha tenido uno, sino tres “Sugar Daddy”, el primero fue a los 15 años y se trató de un vecino que poco a poco se enamoró de ella.
La diferencia entre ellos era de 33 años, él era un norteamericano que estaba de regreso en su país natal, luego de haberse pensionado del ejército de Estados Unidos. “Todo comenzó como una amistad, él pasaba por mi casa cuando yo estaba con mis amigas y siempre nos invitaba a algo, nos llevaba comida y nos pedía que fuéramos a la casa de él, que era la única que tenía piscina, ahí íbamos las chiquillas y los jovencillos del barrio”, dijo a La Nación.
“Sofía” asegura que el señor nunca se sobrepasó con ellas y que, incluso, le pidió la mano a su mamá. Su familia no tuvo problema con esa relación, "ya que les ayudaba a todos, quienes vivían una situación económica crítica", según cita el rotativo.
Con el paso de años, ella conoció a otra persona, con quien tuvo hijos, pero las cosas no funcionaron y volvió con el estadounidense. “Como vivía enamorado de mí, me dijo que quería hacer algo por mí y me regaló una casita, actualmente mi mamá ya lleva más de veinte años de vivir ahí. Además, me daba lo que le pedía”, continuó en su relato.
Una vez que falleció su amigo por conveniencia, “Sofía” se enfrentó a la realidad de que tenía que empezar a pagar sus cosas después de mucho sin hacerlo. Pero rápido apareció otra persona que tomó el lugar que tuvo antes el pensionado. En aquel momento, la diferencia de edades era de unos 20 años.
No todo es felicidad
Pese a que “Sofía” sabía que mucha gente juzgaría su vida, ella afirma que siempre ha tratado de trabajar y de prepararse como el resto de las personas, con la diferencia de que tiene siempre "una ayudita extra". A su “Sugar Daddy” actual lo conoció en una actividad empresarial y aquello fue amor a primera vista, al menos por parte de él, agrega "La Teja".
Hasta aquí, la historia parece como un cuento de hadas, pero no es así y “Sofía” también relata lo difícil que ha sido esta situación. Hace un tiempo ella estuvo conociendo a alguien con quien había muy buena química, incluso ya pasaba por su mente si darle un espacio al amor en lugar de una relación por conveniencia, pero abusó sexualmente de ella tras ponerle una sustancia en su bebida.
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"Cuando despertó tenía mucho dolor en la zona genital. El hombre la violó y huyó. Por más que denunció el caso y sabía bien datos del sujeto, no pudo hacer más bulla, pues tenía miedo de que él se diera cuenta y les quitara los beneficios a ella y a su familia", concluye el artículo publicado.
La tendencia del "Sugar-Dating" se originó en Estados Unidos, expandiéndose posteriormente en Europa y hace un par de años, finalmente llegó a Latinoamérica de la mano de aplicaciones que afirman tener las herramientas perfectas para encontrar una pareja ideal.
En una encuesta de MySugardaddy, las denominadas "Sugar Babies" dieron su opinión sobre qué es lo que buscan en un hombre mayor o un "Sugar Daddy". Entre los motivos principales está el acceder y vivir experiencias de lujo, viajar, acudir a cenas en restaurantes elegantes o ser invitadas a eventos VIP.