Lo que debía convertirse en alegría para una joven pareja que esperaba a su primer bebéterminó en una larga agonía en Colombia.
Mónica Vega tenía siente meses de embarazo cuando los médicos le realizaron una ecografía la cual dio como resultado algo inusual.
Con asombro los especialista detectaron que el feto tenía en su viembre otro feto más pequeño y que este tenía su propio cordón umbilical, líquido amniotico y tenía sus extremidades, que crecia al mismo tiempo que su hermana, pero carecía de cerebro y corazón por lo que sobrevivía a costas de su gemela.