Es muy probable que al leer el titular y al ver la imagen que encabeza esta nota hayas hecho un gesto de repulsión. Pero es cierto: en China sí existen las granjas de cucarachas voladoras.
Ese insecto de aspecto tan desagradable se ha tratado de erradicar desde tiempos inmemorables, sin embargo, sus sorprendentes capacidades de supervivencia las han hecho casi invencibles. Pareciera que están dotadas de un poder sobrenatural que las hace inmunes a la destrucción.
Seguramente al ver una cucaracha, sobre todo las que vuelan, te invade el pánico, mil escalofríos recorren tu cuerpo y comienzas a gritar y a correr despavorido. Sin embargo, esa no es la reacción que experimentan los chinos que crían cucarachas; ellos las miran y las tocan sin una pizca de asco, pues saben que gracias a ellas se mantienen económicamente.
Al sudeste de China existe un criadero con 10 millones de cucarachas. Li Bingcai, “agricultor” de la provincia de Sichuan es su propietario; él cuida a estos insectos de seis patas como si valieran oro. Las alimenta con comida saludable y las mantiene en pequeñas casas que él mismo les ha construido con placas de madera verticales.
Cada vez que Li entra al cuarto oscuro donde está el criadero, vive una experiencia surrealista y única. Legiones de cucarachas vuelan hacia él y comienzan a caminar sobre su cuerpo; algunas se adhieren a sus mejillas y ojos, pero él no si inmuta ante la presencia de las criaturas.
Li no es único criador de cucarachas en esa localidad; en la zona donde él vive hay decenas de personas que, desde hace varios años, se dedican a esta actividad.
Algunos de esos trabajadores le sacan provecho a estos insectos vendiéndolos a la industria farmacéutica tradicional para la elaboración de medicamentos. La cucaracha americana (Periplaneta americana) es una de las variedades más extendidas y una de las más consumidas, ya que presuntamente tiene propiedades curativas contra úlceras y problemas respiratorios; también se emplea como vigorizante. Otra empresas las utilizan para crear productos de belleza, píldoras para adelgazar, y tratamientos para evitar la pérdida de cabello.
Sin embargo, expertos en medicina de esa nación han pegado el grito en el cielo ante este tipo de negocio y recalcan que la crianza de estos animales no está regulada por normas estrictas, lo que posibilita efectos indeseables en la salud de las personas.
En el caso de Li Bingcai, las cucarachas también son criadas para deleitar el paladar. En las cercanías de su granja, varios restaurantes las sirven tostadas y salteadas con pimiento.
“A la gente le cuesta imaginarse lo delicioso que son, hasta que las pruebas”, explica el criador antes de comerse uno de los insectos vivos.
Alimento 100% orgánico
Como era de suponer, ese tipo de negocio tiene muchos detractores, pues aseguran que es antihigiénico y asqueroso. En 2013 un millón de cucarachas se escaparon de un vivero de la provincia de Jiangsu, es por esa razón, que Li asegura que le pone mucho interés a la seguridad.
A sus repulsivas inquilinas las mantiene en un espacio propicio para su reproducción y crecimiento, con una temperatura de 28 grados y mucha humedad. Para evitar que se escapen ha implementado un sistema de ventanas con una rejilla. El lugar, dice, no es asqueroso pero sí “desprende un olor a ropa mojada”.
“Las alimentamos en un ambiente en el que la higiene está garantizada. Comen alimentos orgánicos, nada artificial”, dice.
El peculiar empresario vende las cucarachas muertas. El “agricultor” coloca a una parte de sus bichos en agua hirviendo y luego deshidrata su armazón. El negocio ha sido tan fructífero que en 2018 vendió una tonelada de insectos a una empresa farmacéutica por un total de 90.000 yuanes (14,000 dólares).
Antes de dedicarse a este exitoso negocio, Li Bingcai tenía su propia tienda de teléfonos móviles, pero en 2016 se le ocurrió la brillante idea de probar suerte con la crianza y venta las cucarachas. El negocio fue exitoso desde el principio debido al bajo coste de producción y a la facilidad para criar esos insectos prolíficos. Actualmente el negocio ha crecido gracias a internet, donde promueve y ofrece su producción.
Li no es el primero ni el más exitoso en este rubro. En la ciudad de Xichang, un grupo farmacéutico ha creado el centro de producción de cucarachas más grande del mundo: cría 6,000 millones de insectos y los vigila con un dispositivo de inteligencia artificial.
