El científico británico Angelo Grubisic, de 38 años, murió en un accidente de salto de base en Arabia Saudita mientras probaba un traje especial con alas, el cual supuestamente era más seguro, según confirmó su familia.
Sus parientes dijeron al portal noticioso BBC que él era “extraordinariamente talentoso” y que “perdió su vida haciendo lo que más amaba: el salto de la base del traje de alas”
“Queremos asegurarnos de que sus logros y ambiciones sean conocidos por el mundo y celebrar la marca que dejó en todas nuestras vidas”, expresaron familiares.
La Universidad de Southampton, donde trabajaba, lo describió como un especialista en el diseño, desarrollo y prueba de sistemas avanzados de propulsión para naves espaciales.
Coronado campeón británico de wingsuit flying (traje con alas) en julio, Grubisic había realizado cientos de saltos.
En 2015 creó el proyecto Icarus, con el objetivo de “mejorar los vuelos humano mediante el desarrollo de un nuevo traje de alas utilizando análisis computacional de última generación, aerodinámica experimental y pruebas”.
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En 2018 trabajó como ingeniero consultor para la misión BepiColombo de la Agencia Espacial Europea para la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA) a Mercurio.
El wingsuit flying, también llamado wingfly, es una modalidad del salto base y del paracaidismo que consiste en lanzarse al vacío vestido con un traje aéreo, que imita el cuerpo de una ardilla voladora, y recorrer largos tramos planeando, para finalmente aterrizar haciendo uso de un paracaídas.
Gracias a estos trajes aéreos, la sensación de velocidad que se experimenta es mayor a la de la caída libre, y permite incrementar el desplazamiento horizontal frente a una disminución del desplazamiento vertical.