Producciones VAM, la empresa salvadoreña surgida en los 80 que aún graba en casete

La compañía sigue trabajando los "mix" musicales como en los años 80 y 90; también se dedican a digitalizar contenido análogo

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Por Enrique Carranza

2019-08-14 7:50:40

Nelson Brand toma un casete etiquetado con The best of 89 y lo coloca en uno de sus reproductores, tras varios intentos, los engranes del aparato trabajan y la cinta comienza a correr.

En los altavoces se escucha la viñeta “en El Salvador nadie coloca la música como producciones VAM” y enseguida inicia la canción Spring love de Stevie B. La definición en los sonidos agudos, medios y bajos es exquisita.

Quienes escuchan esas primeras notas se trasladan a sus años de juventud, el uso del casete y la música ha evocado la nostalgia por los años 80 y 90.

La cinta sigue corriendo, se escucha Silent morning, de Noel Pagan; Only in my dreams, de Debbie Gibson; Situation, de Yazoo, y Easy to touch, de Promise Circle. Estas dos últimas terminan de hacer volar los recuerdos.

Nelson hace pequeños movimientos hacia arriba y abajo con su cabeza, sigue el ritmo de la música, por momentos lo hace con su mano derecha también.

Este es el lugar donde Producciones VAM realiza sus características mezclas musicales; Nelson Brand, es el responsable.

Es un pequeño, pero muy bien equipado, estudio de producción audiovisual, situado al poniente de San Salvador, donde se atesoran varios reproductores caseros y profesionales de casete,  además de algunos aparatos para hacer sonar discos de vinilo y acetato.

Las paredes del local están forradas con espuma sintética para  mejorar la acústica, un estrecho pasillo en forma de “L” en medio de los aparatos es el único acceso.

“El mercado ha cambiado, hoy es nostálgico”,  explica Nelson, quien a la vez expone que lo fuerte en estos tiempos de Producciones VAM es convertir y restaurar formatos de video y audio a los actuales. Además de grabar video, entre otros rubros.

La empresa nació como en octubre de 1986 en la colonia Santa Lucía, de Soyapango, y desde sus inicios se caracterizó por la alta fidelidad en el sonido de sus casete, “que los situaban varios pasos adelante de sus competidores”.

El secreto para ser “insuperable” en la calidad del sonido gran parte se debía a modificaciones en la electrónica de los aparatos; también, a conocimientos adquiridos fuera de El Salvador por sus fundadores.

En aquel entonces el estudio tenía capacidad para grabar hasta 36 casete por hora.

“Esto tiene su toque, se estudian las canciones, las velocidades de las mismas, no solo se da grabar a los aparatos”, comenta Nelson, en tono que parece guardar mucha explicación.

Los conocimientos necesarios para iniciar en el mundo de las producciones musicales provenían de Costa Rica, donde Nelson fue capacitado por estadounidenses para participar en un proyecto de la iglesia a la que asistía.

Antes, Producciones VAM era discoteca, y en aquel entonces, entre muchas otras canciones, hacían sonar Susurro cariñoso y Starship. Además, eran parte de los pioneros en la improvisación (el freestyle), junto a algunas radios.

De 1992 en adelante la industria de las mezclas musicales en El Salvador giró, y los productores buscaron diversificar de rubro.

Facebook es la red social donde más se promueve Producciones VAM, algunos salvadoreños que viven afuera de nuestras fronteras le preguntan si son posibles los envíos de casete con mezclas de los años 80 y 90.