Carmen María es creativa y emprendedora, pero va más allá. Decidida a crecer como empresaria, ya tiene listos los papeles para exportar sus productos, distribuidos en cuatro líneas: Joyería, Hogar, Costume y Mamá (todos con su apellido como sello).
Sabe que vender en el exterior es un camino cuesta arriba, pero ya tiene experiencia abriéndose espacios. Lleva mucho tiempo elaborando accesorios con productos naturales y es hasta hace tres años que ha comenzado a sentirse segura en el negocio.
Ya posee su propia tienda y sus productos gozan de gran aceptación, aunque reconoce que ganar el derecho de piso en el rubro del diseño de moda ha sido un reto cotidiano.
Moda y arte hechos a mano
El mundo de la moda no es ajeno para Carmen. Su abuela, y después su madre, tuvieron boutiques y ella creció en un ambiente en el que lucir bien y con ropa de tendencia era la regla.
Pero también desde adolescente se decantó por la creación de productos artesanales y experimentó, haciendo joyas para sus amigas o tarjetas de invitación de boda y hasta ropa por encargo.
Enamorada de los productos de nuestra tierra, estudió Diseño Artesanal en una universidad privada y luego hizo una maestría en Administración y Marketing, ya que la idea de emprender la acompañaba desde siempre.
La llegada de Lía, su hija mayor, hoy de tres años, la empujó a dar ese paso. “Yo daba clases de arte en un colegio privado, pero quería pasar más tiempo con mi hija, así que renuncié y comencé esta idea de negocio, que hasta hoy me permite dedicarme también a la familia, que es muy importante”, contó Carmen.
Más tarde llegaría Miguel, su segundo hijo, hoy de año y medio, y ambos siguen acompañándola a la tienda y a todas partes donde ella promueve sus productos.
El colectivo El Mercadito fue el primer lugar donde Carmen llevó sus creaciones, apoyada por su esposo. Lo vendió todo. A partir de ahí no paró. Hoy Rengifo es una marca preferida por muchas chicas.
“Lo que hacemos con los productos es rescatar las técnicas artesanales; pero vender productos de tendencia, no artesanía. La gente lo que compra lo quiere usar”, comentó Carmen, orgullosa.
La joyería con baños de oro, plata y acero, con piedras naturales es de los productos más buscados, también elabora carteras de fibras naturales, desde monederos hasta bolsos de playa, mantelería para el hogar , ropa y últimamente tiene en proceso su más reciente línea, Rengifo Mamá.
Carmen trabaja con artesanas que como ella, son mamás, e intenta darles espacio para que puedan cuidar de sus hijos y a la vez, recibir un ingreso.
Respecto a las piezas que elabora, dice que cada una tiene un sello propio y es única, las probabilidades de que alguien use algo similar son casi nulas.
Entre los proyectos a corto plazo, Carmen ya mira otros mercados, pero su compromiso es seguir produciendo artículos de calidad y que vayan acordes con las tendencias internacionales de moda.
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