6 “pecados” de la moda

No hace falta ser una famosa celebridad para aprender lo básico de cómo vestirte. Recuerda que tu imagen comienza por proyectar lo que eres a través de lo que te pones. No cometas estos errores básicos pero muy comunes en mujeres y hombres.

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elsalvador.com

Por Alfredo García

2018-08-04 4:34:06

“Uno de los peores errores que puedes cometer a la hora de vestir es convertirte en una víctima de la moda y ponerte todas las prendas, accesorios y tendencias simplemente porque las ves anunciadas por el televisor y las revistas sin tener en cuenta tu tipo de cuerpo, personalidad y estilo de vida”, advierte Martín Llorens, experto en moda y estilos, conferencista motivacional y presentador de televisión.

“Como nadie te lo va a decir directamente a la cara por temor a ofenderte, creo que es mi responsabilidad y deber, como amigo y asesor de imagen y belleza externa, y como estilista espiritual, contarte, con todo mi amor y respeto, cuáles son los errores más comunes que la gente comete a la hora de vestir”, agrega Llorens, en un artículo para www.huffingtonpost.com.

1. Descuidar tu ropa interior

La ropa interior tiene que sentirse súper cómoda y si es atractiva mejor. No darle importancia puede tener un precio caro. Si no usas la correcta según tu tipo de cuerpo, el resto de las prendas que vayas a ponerte encima no van a lucir bien. “Si la ropa interior se marca a través de la ropa, quiere decir que tienes la talla incorrecta, y que además llevas ropa muy apretada para tu tipo de cuerpo”, explica Llorens. Tampoco es de buen gusto que muestres la marca de tus bragas.

2. Tallas incorrectas

Uno de los errores más comunes al vestir es que escojas tallas demasiado pequeñas o grandes para tu cuerpo para intentar disimular esas libras de más. Esto solo provoca el efecto contrario, resaltarlas más. “La mejor opción que tienes es buscar ropa exactamente de tu talla, sin guiarte necesariamente por los números o símbolos de la etiqueta sino por el entallado. Busca ropa con cortes y diseños clásicos que estilicen tu cuerpo”, aconseja Llorens.

3. No conocer tu cuerpo

Estar invadidos de imágenes de superestrellas con cuerpos esculturales te puede hacer caer en el error de que una prenda te quedará igual. “No porque un vestido quede muy bonito en el cuerpo de Jennifer López o Sofía Vergara quiere decir que automáticamente ese mismo vestido va a quedar bien en tu cuerpo”, subraya Llorens. La clave está en conocer tu figura, sus medidas, lo que te talla bien y mal. No todos los estilos y modas son para una misma persona.

Una modelo presenta la colección de Jean-Paul Gaultier. Foto/AFP

4. Presumir marcas

Si eres apasionado de las marcas, no es necesario que vayas mostrándolas como una valla publicitaria. “En realidad, si quieres tener clase y elegancia, cuanto menos enseñes quien fabricó o diseñó tus prendas, mucho mejor. Tanto si te has gastado el dinero o es una imitación, lo importante es como tú llevas la ropa. La única razón por la que te dejaría que llevaras el nombre de la marca en la ropa o accesorios es si la compañía te paga mucho dinero por hacerlo”, advierte el estilista.

5. Exceso de brillo

No es que las prendas o materiales brillantes sean malos, el “pecado” está en no adecuarse a la ocasión. “Aunque esté muy de moda, yo lo pensaría dos veces antes de ponérmelo, a menos que seas una modelo o trabajes en el mundo del espectáculo. Por lo tanto, cuidado con los tops o vestidos de lentejuelas que te harán ver como las luces en la discoteca”, destaca el experto en estilo. También sé prudente con el uso de joyas y el maquillaje brillantes.

Imagen de referencia. Foto/ Archivo

6. Falta de coherencia con la edad

Si tienes 40 pero te vistes como de 20 no hace que te veas más joven, en realidad es lo opuesto. Solo conseguirás verte de 40 luchando desesperadamente por lucir igual que antes. Recuerda que es mejor ir acorde con cada etapa de tu vida. No tienes porqué quedarte estancada usando tus mismas prendas por muchos años. La evolución que lleva tu vida también debe reflejarse en tu forma de vestir. Atrévete a probar estilos nuevos, basados en tu propia personalidad.