Hace unas semanas, Rafael Amaya anunció que regresaría al mundo de la farándula con un nuevo proyecto, junto al cantante Roberto Tapia, quien le ayudó a alejarse de sus adicciones. A través de una gira de conciertos por Estados Unidos, la estrella mexicana volvería a estar cerca de sus fans luego de tantos años alejado de ellos.
Pero no tardó mucho en estar en el ojo del huracán, pues una revista mexicana publicó que el protagonista de “El señor de los anillos” había recaído, pues fue visto corriendo por las calles de Tijuana, fuera de sí y gritando que lo querían secuestrar.
A través del programa “Suelta la sopa”, Karem Guedimin, el manager de Amaya, salió en su defensa y desmintió que las cosas ocurrieron como lo muestra la publicación.
“En la publicación dicen que estaba desquiciado, pero él nada más pidió un Uber en una gasolinera de ahí”, aseguró el empresario.
“No tiene a nadie que vive en Tijuana, estaba en un departamento que tiene ahí y su familia vive en Tecate (en Baja California). No salió de la casa de su familia ni nada, él salió a pedir un Uber e iba a ir a una dirección. Bien lo dicen, estaba en una zona residencial y está por ahí su departamento. Es lo que pasó”, agregó.
De igual forma, comentó que el actor está muy molesto con toda la situación y él mismo quería explicar todo, pero estaba muy alterado y no quiere dañar su proceso de rehabilitación, pero afirmó que Amaya pronto hablará.
Mientras tanto, el intérprete se dejó ver, en las redes sociales, en compañía de Tony Hernández, una personalidad del municipio mexicano de Tijuana y fundador del sitio “Yo amo Tijuana”.
En esta ocasión, Rafa aparece de lo más sonriente y saludable con un look, muy diferente al que tenía e incluye una barba de algunas semanas.