Querida y admirada, no solo por todo su talento como comunicadora, sino también por ese carisma y empatía que obsequia a diario a todos sus seguidores. Luciana Sandoval es una mujer salvadoreña muy influyente en redes sociales.
Además de ser muy activa, se ha propuesto fomentar los beneficios de un estilo de vida saludable, por lo que su cuenta de Instagram ofrece post que muestran su rutina de ejercicios y la sana alimentación que procura consumir.
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Una de las últimas recomendaciones que esta compatriota empoderada ha sugerido en sus stories es no dejar de beber agua todos los días. Si bien confiesa que consumirla con más frecuencia se ha convertido en uno de sus nuevos propósitos, también explica el por qué de su esfuerzo.
Ella ha comprobado que mantener una buena hidratación ayuda a contrarrestar esos dolores de cabeza producto de beber poca o casi nada de agua.
Como ella misma relató en una entrevista con elsalvador.com el pasado julio, desde agosto de 2019, tomó la decisión de ponerle un alto a ciertos hábitos que afectaban de forma negativa a su salud. La presentadora de “Viva la mañana” asegura que todo el esfuerzo que ha realizado ha dado los resultados deseados.
“No ha sido un cambio solo en lo que se come o en hacer una rutina de ejercicio, implica también un cambio de mentalidad, de querer tener una vida más ordenada, de cuidarme y de entender que lo más valioso es lo que hay en nuestro interior. De nada sirve que me vista bien y me arregle si internamente estoy mal, si no tengo los nutrientes y a la mitad del día me voy andar desmayando”.
Ahora, ha decidido enfatizar la importancia de hidratarse correctamente. Y ella misma manifiesta que cuando no bebe la suficiente agua, sufre de dolores de cabeza y el estrés contribuye a intensificarlos. Y si la temperatura sube y el calor aumenta, los malestares también.
Si bien el signo más conocido de la deshidratación es la sed, la realidad es que hay muchas otras consecuencias -como lo explicó en su oportunidad la nutricionista Ana Cristina Gutiérrez-, algunas de ellas muy serias, por ejemplo: boca seca, fatiga, dolor de cabeza, ansiedad, piel seca, volumen sanguíneo disminuido, mareo, calambres musculares, estreñimiento y baja presión arterial.
El líquido por excelencia para hidratarse es el agua, pero también se pueden consumir frutas como el melón, la sandía o la naranja, por citar algunas que aportan al cuerpo además de hidratación muchos otros nutrientes. Los caldos e infusiones también ayudan a la hidratación; sin embargo, la experta desaconseja el consumo de refrescos o gaseosas azucaradas, ya que contienen una alta cantidad de azúcar que no es saludable.
Luciana ya te lo ha sugerido, opta por el agua y disfruta de sentirte bien cuando tu organismo está bien hidratado.
