La doble de la Reina Isabel que tiene todos los privilegios

Ella Slack se ha dedicado a sustituir a la reina en los ensayos de grandes eventos por 30 años.

descripción de la imagen

Por Diana Orantes

2018-12-02 10:56:09

La revista Vanity Fair contó en su publicación “La doble de Isabel II que lleva 30 años sustituyéndola en los ensayos de su agenda”, que la monarca ha tenido una sustituta para todos los ensayos protocolarios y nadie se había dado cuenta antes.

La protagonista de esta historia se llama Ella Slack, una mujer de 75 años de edad con la misma estatura y peso que la reina. No cobra ningún centavo por ejercer este trabajo desde el año 1988 pues cree que es un privilegio y un gran placer.

“No me parezco a la reina”, confesó en un programa televisivo en el 2017 donde también dijo “he ido en su carroza e incluso en un bote hasta la Torre de Londres. También he estado en la apertura del Parlamento. Cuando voy en coche o carroza, hasta saludo”.

Recuerda que la primera vez que asumió el papel de la reina fue durante la celebración del Día del Anmisticio en El Cenotafio de Londres para la BBC.

Te puede interesar:

El cadete que rompió corazones en la toma de posesión de López Obrador

El guapo militar despertó emociones entre los tuiteros. Mientras unos publicaron divertidos memes otros se enamoraron de este misterioso joven

“¿Cuánta gente tiene la oportunidad de sentarse en la carroza real o caminar por el castillo de Windsor antes que la propia reina?”, reflexionó al doble de Isabel II. También aclaró que no tiene acceso a todos los lugares, por ejemplo no puede sentarse en el trono de la Cámara de los Lores por regla estricta.

Curiosamente Slack jamás ha cobrado ni un centavo por su trabajo aunque invierte un poco para parecerse a la reina. Por ejemplo se mandó a hacer un bolso negro de segunda mano parecido al inseparable Launer de la monarca. Este le costó a penas una libra.

OTRO SECRETO DE LA REINA

La princesa Ana, hija de la reina Isabel, confesó que hace un tiempo su madre recibió un obsequio muy curioso de un grupo de estudiantes australianos.

Se trató de una mano robótica para que la royal saludara. El aparato consiste en un guante de peluche con una palanca de madera que al apretar comienza a girar la mano.

No se sabe si la reina lo ha utilizado alguna vez. Algunos creyeron que el obsequio sería impertinente, pero hasta la fecha pudo haberse convertido en gran aliado.