Si bien el colombiano Carlos Vives se mantenido alejado de controversias y escándalos, en los últimos días ha sido objeto de críticas por "supuestamente" despojar a su madre, doña Araceli, y dejarla prácticamente en la calle, mal aconsejado por su esposa Claudia Elena Vásquez.
Los hechos fueron difundidos por la revista TVNotas, que se contactó con un supuesto amigo del cantante, y que no fue identificado. De acuerdo con el informante, Guillo, el hermano de Vives, fundó en 1998 un restaurante llamado Gaira Café, en Bogotá que de inmediato fue exitoso. Debido a ello, Carlos los convenció en 2006 para asociarse con ellos y ampliar las instalaciones.
Los problemas surgieron luego de la boda del intérprete de Carito, en 2008, pues a partir de allí Claudia se involucró en los negocios. "Él la dejaba intervenir; lo aconsejaba y manipulaba para que hiciera las cosas a su favor”, aseguró el amigo del artista.
Lo más duro comenzó hace seis años, cuando a Claudia se le ocurrió construir un hotel, a Carlos le pareció la idea y convenció a su madre y hermano. "Claudia les prestó a Guillo y a su mamá un millón de dólares para la construcción, pero se vio muy lista porque les hizo firmar unos pagarés”, aseguró la fuente.
Cuando finalizó la construcción llegó la pandemia, por lo que el cantante de vallenato utilizó las instalaciones como estudio de grabación en vista de que no había turismo. Además, por las mismas razones, el restaurante cerró, y ya no hubo una fuente de ingresos; ante esto, Claudia hizo efectivos los pagarés, consiguiendo que su cuñado y su suegra saldaran la deuda con su parte de la sociedad.
Según el informante, el famoso artista no hizo nada por detener a su esposa en las acciones contra su madre y hermano. Dijo además que la madre del colombiano se quedó sin sus acciones y sin casa propia, por lo que ahora vive con otro de sus hijos.