¿Qué pensamientos surgen en la mente de una niña que es vendida a un proxeneta cuando apenas comienza a vivir? ¿Qué emociones la dominan durante el suplicio que le infringe su verdugo a expensas de la sociedad misma? ¿Existe en ella alguna esperanza de libertad y justicia?
Preguntas como estas motivaron al actor, dramaturgo y director de teatro Enrique Valencia a crear su drama ‘El rastro’, un thriller, que sin proponérselo, da voz a las voces silenciadas de las víctimas de secuestro.
“Es una metáfora sobre el secuestro, ya sea uno sistemático y legalizado por el Estado o el espejo de los secuestros que suceden todos los días alrededor del mundo”, refiere el realizador salvadoreño.
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La historia de Luz, una pequeña huérfana de madre que es vendida a un hombre que la prostituye durante 21 años, debuta en el Acto I de la Temporada 2018 del Teatro Luis Poma, este jueves 12 de abril, a las 8:00 de la noche. La dramaturgia es de Valencia y la escenografía está inspirada en la instalación ‘Hogar dulce hogar’ del artista plástico Ronald Morán.
Protagonizan Dinora Alfaro y Rubén Quintanilla, quienes en la vida real son pareja. Vale destacar que esta es la primera experiencia sobre las tablas para el triatlonista salvadoreño. “Estar en escena con mi pareja, en un tema que habla sobre la constante violencia que se ejerce sobre la mujer, ha sido sumamente interesante”, afirmó la también directora, que el próximo 24 de abril viajará a Costa Rica para asistir a la entrega de los Premios Nacionales de Cultura, en donde recibirá una mención honorífica por el trabajo realizado en la coproducción costarricense-salvadoreña ‘La huida’.
“Antígona. Dese la oscura raíz del grito” es una adaptación del clásico atribuido a Sófocles realizada por Jean Anouilh. Foto cortesía / Rebeca Ortez
“Tengo la dicha de que él es una persona sumamente noble, con quien siempre hemos hablado del tema. Además, ha sido emocionante. Él no es artista sino deportista y en esta obra cazaba perfectamente, pues necesitábamos a alguien con buena presencia, mucha fuerza y disciplina, porque la carga dramática la lleva mi personaje”, explicó Alfaro.
‘El rastro’ es la primera de tres producciones que el grupo de teatro Acento Escénica -dirigido por Valencia- presentará en el espacio cultural ubicado en la 10° etapa de Metrocentro. Las otras puestas en escena son ‘Antígona. Desde la oscura raíz del grito’ y ‘El médico a palos’, una tragedia y una comedia respectivamente. “Es necesario destacar que en las tres obras que vamos a tener esta temporada imperan las voces femeninas. Hay una permanencia de la figura femenina”, subraya Valencia, al destacar que en el tríptico escénico el público conocerá a mujeres muy fuertes.
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En ‘El rastro’ y ‘Antígona’ Dinora Alfaro interpreta a dos personajes claves; y en ‘El médico a palos’ lo hace la actriz Lidia Ocampo. El elenco en la adaptación del clásico atribuido a Sófocles está integrado por Alfaro y Valencia, Mabel Ricas, Maru Galvez, Lidia Ocampo, Luis Lozano, Luis Galvez y Emanuel Merino.
En la traducción que Ricardo Lindo hiciera de la comedia-farsa de Molière, actúan los mismos, a excepción de Alfaro y Valencia.
El director de Acento Escénica garantiza al espectador que desee disfrutar de todas las presentaciones de esta mini-temporada, que cada vez disfrutará de una versión renovada. “Aquello que hicimos existe. No estoy seguro de si vuelve, revive o renace… simplemente existe. Y en eso reside la belleza del teatro, en que es inefable”, expresó Valencia.
“El médico a palos” que presentará Acento Escénica es la traducción de la comedia de Molière realizada por Ricardo Lindo. Foto cortesía / Rebeca Ortez