Christian Bale junto a la actriz Caitriona Balfe, quien interpreta a Mollie Miles en Ford v Ferrari. Foto EDH / 20th Century Fox
¿Dejarías que Matt Damon sea el director de una película tuya?
Me encantaría que me dirija. La forma en que lo ve todo, tiene una perspectiva muy grande. Creo que puede… en cierta forma tuvo una conversación de directores con Jim (James Mangold, el director de ‘Ford v Ferrari’), cuando yo hubiese pasado totalmente inadvertido haciendo lo mío. Me encantó trabajar con este hombre.
¿Incluso con la escena donde le pegas en la cara?
Me dio tanta satisfacción… (Risas) Muchísima satisfacción y creo que él también disfruta cuando le pegan. Insistía en hacerlo. Y lo hizo muy bien.
Hay algo bastante particular que sorprendió durante el estreno del Festival Internacional de Cine en Toronto. Cuando la película ya había terminado, te quedaste sentado hasta el último nombre de los créditos, sacando fotos a la pantalla…
Eso fue por diferentes razones. Por un lado, yo sabía que iba a tener que estrechar las manos de la gente, pero estaba lagrimeando. Esta película va más allá de las carreras de autos. Ya la había visto antes, aunque nunca con público. Y me rompe el corazón la pérdida de Miles y la familia, la hermosa actuación de Matt y el final donde (Caroll) Shelby habla con Peter (Miles), es algo que siempre me destruye. Pero también va más allá de la historia, porque es una historia que pasó a ser parte de mi vida, la gente que perdimos, la familia y los amigos. Por eso me quedé sentado, tratando de recuperarme. Sabiendo que iba a tener que hablar con la gente, necesitaba verme como alguien más competente. Pero también en los créditos mencionan unas cuantas personas que yo también quise fotografiar para mandarles un mensaje de texto, enseguida después, porque estaba muy feliz de ver sus nombres allá arriba.
¿Cómo tu doble, Robert Nagle?
Ah, él es el mejor. Trabajamos bastante juntos. He pasado noches enteras en Michigan con él, al costado de los autos, disparando ametralladoras y haciendo que de vueltas con el auto y cosas así. Incluso fuimos juntos a una escuela de carreras, una verdadera escuela del corredor Bob Bondurant, en Arizona. Fue algo magnífico. El hombre que interpreta al corredor Denny Hulme, el socio de Miles en Lamont, se llama Ben Collins y es un verdadero corredor de carreras. De verdad. El era el corredor anónimo The Stig del show de televisión ‘Top Gear’. Ni siquiera sé si debí haberlo dicho… se suponía que era uno de los más grandes secretos. ¡Es terrible lo mío!
¿Qué tan bueno eras conduciendo autos, antes de filmar ‘Ferrari v Ford’ y qué tan bueno te consideras ahora?
Yo todavía tengo una vieja camioneta de segunda mano y te diría que sé como meterme entre los autos por los rincones, sin chocar. Eso me encanta. Me fascina. Es tan divertido. Y todavía tengo mi Toyota Tacoma. La película será sobre Ford, pero yo amo mi Tacoma (Risas). Me encantaría decir que yo soy el que corre los autos… ¿Acaso Steve McQueen y James Garner no lo hacían? ¿En qué estábamos pensando con Matt? ¿Por qué no fuimos nosotros los que corrimos en auto? Pero claro, hubiese sido un insulto asumir que podíamos hacer algo así. Yo igual hice todo lo que me dejaron hacer, aunque en la compañía de seguros estaban bastante paranoicos con todo esto. Con el director necesitamos ensayar saliendo con el Cobra por la pista de carreras y cuando yo me quedaba atrás de cámaras me encantaba correr, dar vueltas. Es adictivo. Por eso entiendo tanto a Ken Miles y lo que hacían estos corredores de carreras. Y la contradicción del elemento de preocupación, precisamente, te hace sentir más vivo, porque el peligro es inherente. Pero te garantizo que ninguno de estos hombres hubiese corrido un solo auto si no hubiera sido peligroso. Y fue maravilloso darme el gusto de interpretar un personaje así.