Lucrecia Landaverde es una abogada penalista que atiende diversos casos, es muy activa en redes sociales orientando a las personas a no meterse en problemas con la ley.
¿Cómo se procesan los casos de violencia contra la mujer?
En principio, es importante establecer que hay dos cuerpos normativos. En primer lugar, está el Código Penal que tipifica ciertas conductas que protegen bienes jurídicos relativos a la libertad e indemnidad sexual, como la violación, agresión sexual y acoso sexual, entre otros delitos, cuya persecución es oficiosa por ser delitos de acción penal pública.
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Por otro lado, existe la Ley Especial Integral para una Vida Libre de Violencia para las Mujeres (LEIV) que define y conceptualiza todos los tipos de violencia en contra de la mujer, entre estos: la violencia económica, feminicida, física, psicológica, emocional, patrimonial, sexual, laboral etcétera, en este cuerpo normativo se establecen y describen los tipos penales especiales, fijando las sanciones que corresponden para cada uno. Por el carácter especial e integral de esta norma, se han constituidos tribunales especiales con el fin de dar una respuesta más efectiva al problema de la violencia en general.
En más de alguna ocasión he escuchado de un abuso en las denuncias que hacen algunas mujeres, ¿es cierto eso?
No sería correcto negar que existe la violencia contra la mujer, pero también es cierto que existe un deliberado abuso en las denuncias porque muchísimas veces estas denuncias están motivadas por insatisfacciones o descontento entre las partes materiales (denunciante y denunciado).
“No sería correcto negar que existe violencia contra la mujer, pero también es cierto que existe un deliberado abuso en las denuncias motivadas por insatisfacciones o descontento”.
Si una mujer quiere deshacerse de un hombre, la LEIV, es la herramienta perfecta, porque esa ley recoge una amalgama de tipos de violencia que incluso son difíciles de comprobar, como la “violencia simbólica” o la “violencia psicológica” pero esa ley cuando una mujer denuncia lo asume como hechos ciertos, violándole el derecho a la presunción de inocencia al imputado.
Por ejemplo, en los casos de violencia psicológica, esta violencia se determina a través de dictámenes periciales, si el resultado del examen psicológico dice que la supuesta víctima presenta alteraciones o traumas, se le imputan al denunciado, sin importar que eso traumas o daños psicológicos hayan sido producidos por otros factores, ya sean del pasado o del presente, como los efectos de la inseguridad en general o de la misma pandemia. Para que una mujer no tenga ningún tipo de afectación psicológica debe llevar una vida perfecta sin ningún tipo de preocupación ni estrés de nada.
¿Qué tipo de casos ha visto usted, en donde las denuncias parezcan inventos o revanchismos?
Primero debo expresar que yo no defiendo agresores, en todos mis casos que son muchísimos siempre ha existido una razón por la que la denunciante decidió procesar judicialmente a su novio, conviviente o esposo. Normalmente siempre ha habido una relación sentimental previa. Hay excepciones, pero esas que le menciono son las que predominan, y siempre se ha tratado de una venganza o revanchismo, por eso es que he podido demostrar la inocencia de mis clientes. En los casos que yo he defendido las verdaderas víctimas han sido los acusados porque han tenido que pisar las rejas por una acusación calumniosa, injusta.
¿Qué se hace en esos casos con los acusados?
En mi caso particular mi cometido siempre es ejercer la mejor de las defensas, lograr la libertad de mis clientes, el problema es que cuando una persona ha sido encarcelada no presentando peligro de fuga, y sin antes haber sido vencido en juicio, aunque salga libre siempre será una injusticia porque la detención provisional debe ser la excepción, no la norma, ni la regla, pues no es justo que un inocente pierda su libertad por el simple hecho de estar enfrentando un proceso judicial en el que deben de demostrar su culpabilidad, pero en nuestro sistema de justicia es al revés, aquí los abogados tenemos que demostrar que nuestro cliente es inocente, porque de atajo lo condenan los medios y la sociedad. Si una persona sale en un noticiero o en las redes sociales esposado, todos asumen que es delincuente y por tanto culpable, aunque sea una persona trabajadora e inocente.
¿Qué es lo que está pasando, son denuncias mal intencionadas?
Muchos inocentes pierden la libertad, y si no tienen los recursos económicos para pagar buenos abogados particulares corren el riesgo de ser condenados, porque abogados habemos muchos, pero eficientes y correctos somos muy pocos.
¿Qué recomendaría como abogada?
Primero que los hombres respeten a la mujer; segundo que, si una mujer es conflictiva, pues que tengan el mayor cuidado con las palabras y hasta con las miradas y que por nada del mundo vayan a tener ningún tipo de contacto físico con ellas que se pueda tergiversar en un momento acalorado. Y, por último, que en su móvil siempre cuenten con el teléfono de un buen abogado, por si acaso.