Toño, el cargador de bultos de Tonacatepeque, honró la memoria de una víctima de feminicidio el día de su graduación

Hace un año, Jocelyn Milena Abarca, de 27 años, fue asesinada por su pareja. Ella debió haber sido parte del grupo de graduados de la Universidad Tecnológica. Su presencia en la ceremonia fue posible por medio de un cuadro que su amigo, Ismael Antonio Oviedo, mandó a pintar para rendirle tributo.

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Mario Hernández, de 36 años, originario de Estanzuelas se dedica a hacer retratos y dibujos con la técnica de la aerografía. Su puesto esta localizado a la entrada de ciudad El Triunfo, en Usulután, en el km 105 de la carretera Panamericana. Foto EDH/ Menly Cortez

Por Menly Cortez

2019-07-18 10:52:26

La de Ismael Antonio Parada, conocido como Toño por sus familiares y amigos, es una historia de sacrificio, convicción y superación. Pasó años cargando bultos en un mercado y con lo que lograba ganar pagó sus estudios hasta que se graduó de licenciado en Comunicaciones. Esa fecha fue especial, no sólo por el largo y difícil camino seguido por él, si no porque – además – se lo dedicó a alguien especial: A Jocelyn Abarca Juárez, quien fue asesinada por su compañero de vida.

Con ese pequeño acto se trajo al presente a otra joven que también luchaba por sus sueños, pero que murió de la manera menos esperada.

 

Toño ha demostrado su entrega por ayudar a los demás. Hace unas semanas, el joven entregó una cama a una anciana de pocos recursos, como parte de una promesa que se hizo a si mismo si conseguía graduarse como licenciado.

 

Jocelyn Abarca fue brutalmente asesinada por su pareja el 5 de julio de 2018 en la colonia Altos del Cerro, en la zona de Ciudad Credisa, en Soyapango, al oriente de San Salvador. En esa casa habían convivido 10 años.

El cuerpo de la joven fue desmembrado y sus partes esparcidas en la 17a. Avenida Sur, en las cercanías del cementerio Los Ilustres, en San Salvador; y detrás del colegio Emiliani, al poniente de San Salvador, en la madrugada del 6 de julio.

Por ese atroz hecho fue detenido, días después, Ronald Atilio Urbina, compañero de vida de Jocelyn. El seguimiento a través de las cámaras de videovigilancia de la ciudad y el rastreo de las telecomunicaciones, a partir del uso de herramientas tecnológicas, fue clave para establecer la acusación.

Actualmente, Urbina se encuentra detenido y enfrenta el delito de feminicidio agravado.

La muerte – y la forma en que fue asesinada – de Jocelyn conmocionó a la comunidad educativa de la Universidad Tecnológica, donde era apreciada por sus compañeros de estudio.

Desde las 5 de la mañana Ismael Antonio Parada trabaja de cargar bultos en el mercado municipal de Tonacatepeque. Foto EDH/ René Estrada

Uno de sus amigos era Toño, quien la recuerda así: “Conocí a Jocelyn cuando llevaba materias comunes en los primeros años en la universidad”.

Él tiene en su memoria a Jocelyn como una de las tres personas que conocían su difícil situación económica y que siempre lo apoyaron y lo inspiraron para no rendirse en su sueño de convertirse en profesional. – “Ya vas a ver que juntos vamos a llegar a la especialización”, le repetía Jocelyn.

El ahora licenciado en Comunicaciones recuerda que se encontraba con su familia en San Miguel cuando se enteró del asesinato de su amiga. Uno de sus primeros pensamientos fue prometerle que la recordaría en la ceremonia de graduación de alguna manera.

La iniciativa

La fecha de la graduación, y la culminación de ese largo camino, se acercaba en abril pasado y Toño aún tenía la idea de hacer un homenaje a la compañera víctima de feminicidio.

La mejor manera de hacerlo era tenerla presente en el acto, por medio de un retrato que mostrara a Jocelyn como una graduada, con su toga y birrete.

Para cumplir ese propósito, Toño buscó al artista Mario Hernández, a quien conoció en redes sociales, para que le hiciera un retrato de Jocelyn, tal como lo había pensado.

Al artista, quien administra el negocio “M.design+Arte” en El Triunfo, Usulután, Toño le dejó de referencia una fotografía de Jocelyn y otra de una señorita ya graduada para el cuadro que le había encargado. Hernández dice que en ese momento no entendió por qué no le entregaron de una vez una foto de Jocelyn con toga y birrete, como lo esperaba.

Aún con la duda, el artista comenzó la obra y agregó las vestimentas de graduación a Jocelyn. Posteriormente, Toño le comentó que la joven había sido asesinada por su pareja. Entonces, Hernández se conmocionó, pero al mismo tiempo se mostró honrado de haber realizado el trabajo.

Foto EDH/ Cortesía

El tributo

Llegado el día de la graduación, Ismael junto a la mejor amiga de Jocelyn, Ely Monroy, hablaron con compañeros de estudios, profesores y personal de la secretaría de comunicaciones de la universidad para que les ayudaran a hacer el homenaje a la joven.

Toño relata que para él fue un momento de emoción subir al escenario y recibir su título, pero lo fue aún más cuando puso su diploma en el suelo y levantó el cuadro de Jocelyn. “Todos se pusieron de pie y aplaudieron. Eso me motivó a levantar el cuadro aún más alto”, recuerda.

Para Toño, la muerte de Jocelyn fue una pérdida irreparable, pues habían asesinado a una persona que fue un gran apoyo en sus primeros años de estudio y que, a pesar de que fueron separados por la carga académica de las carreras que cursaban, nunca perdieron el contacto.

El retrato y la memoria

Jocelyn Abarca fue una de las 383 víctimas de feminicidio que se registraron en el 2018.

El pasado 5 de julio se cumplió el primer aniversario de ese asesinato. Y, hoy (19 de julio), la joven, quien estudiaba licenciatura en Psicología, cumpliría 28 años.

Según Yesenia Juárez, madre de Jocelyn, no hay día que pase que no la recuerde: “Ella era muy sonriente, dedicada y generosa. Una de las cosas que más me duele es que le hayan frustrado el sueño de sacar su especialización”.

Desde la pérdida de su hija, Juárez fue incluida por los compañeros de Jocelyn en las actividades que debía realizar en la recta final de sus estudios, como la presentación de tesis y la ceremonia de graduación.

Durante la ceremonia de graduación realizada el 25 de abril anterior, las autoridades de la universidad ofrecieron un minuto de silencio en honor a su memoria.

“Mi mayor sueño era verla recibiendo su título y verla en ese cuadro fue como que si se hiciera realidad”, recuerda Juárez, quien está agradecida por las demostraciones de amor de las amistades de su hija y espera que su muerte sea un referente para llamar la atención de las mujeres que sufren violencia por parte de sus parejas, para que denuncien o busquen liberarse del peligroso ciclo.

Imagen de Jocelyn Abarca hecho por Mario Hernández. Foto EDH/ Menly Cortez

La denuncia

Según datos de la Policía Nacional Civil, durante el primer trimestre del 2019 se recibieron 18 denuncias diarias por delitos de violencia contra las mujeres.

Pero las autoridades recalcan que muchas de las víctimas continúan callando debido al temor que tienen de su pareja.

La información policial revela que los feminicidios conforman el 12% de las muertes violentas en El Salvador, siendo San Salvador uno de los departamentos más afectados con la muerte de una mujer cada 18 horas.

El último reporte brindado por la PNC en mayo pasado reveló que, de enero a mayo, se habían registrado 120 feminicidios, 49 crímenes menos que los contabilizados en el mismo lapso de 2018.

FOTOS:

Amigos y compañeros rinden homenaje en el día de su graduación a Joselyn Abarca, víctima de feminicidio

Jocelyn Abarca ya no pudo culminar con el proceso de graduación que le esperaba pues fue brutalmente asesinada por su compañero de vida. Sin embargo, la joven fue recordada por sus amigos y compañeros de estudio durante el acto de graduación.