Tigo Millicom tiene un ambicioso plan de inversión para construir y mejorar la infraestructura digital en El Salvador; es por eso que la compañía de telecomunicaciones anunció este jueves que en los próximos cinco años destinará $500 millones para construir el primer Data Center Tigo El Salvador de tercer nivel, modernizar sus redes fijas y continuar el despliegue de tecnología LTE 4G para redes móviles.
El director ejecutivo de Millicom, casa matriz de Tigo, Mauricio Ramos, indicó que este plan estratégico de inversión va en sintonía con su gran compromiso de construir autopistas digitales y garantizar el desarrollo de las economías y sus ciudadanos a través de la tecnología.
Según el ejecutivo, una de las inversiones más relevantes para la compañía es el Data Center. Este edificio, cuyas obras de construcción física se estiman desarrollar entre 2020 y 2021 pero que este mismo jueves fue encendido de manera simbólica, tiene la particularidad de que será el primero con certificación Tier 3 en El Salvador.
Esta certificación, otorgada por el Uptime Institute, una división independiente de la empresa The 451 Group con sede central en Nueva York, corresponde a la más alta de las garantías que ofrecen en cuanto al tipo de hardware que utiliza el data center para garantizar su redundancia (almacenamiento de información varias veces).
El gerente general de Tigo El Salvador, Edgard Grande, indicó por su parte que el Data Center se convertirá en un eje central del crecimiento de las empresas salvadoreñas, apoyando directamente al progreso del país.
Cabe mencionar que la certificación Tier 3 garantiza que este centro de datos está diseñado, construido y operado con los más estrictos protocolos de seguridad tanto para la información, procesos y espacios físicos; que cuenta con varias fuentes alternativas de electricidad y refrigeración en caso de emergencia; que sus operaciones de mantenimiento no requieren que el centro esté offline en ningún momento; y que tiene una disponibilidad del 99.9 %.
El nuevo Data Center de Tigo El Salvador estará ubicado en la Zona Franca Internacional, en el municipio de Olocuilta, La Paz; requerirá una inversión de $23 millones y se sumará a los otros 10 centros de datos de este tipo que ya tiene Tigo en la región, conectados a través de 147,000 kilómetros de fibra óptica.
“En la economía digital es necesario no solo que la información se mueva de un lugar a otro, en la autopista, sino que la información tenga un lugar seguro donde ser resguardada. Que haya seguridad cibernética, y que esté cerca al lugar en el cual está siendo utilizada”, explicó Ramos.
En ese sentido, como su información y la de sus clientes es uno de los activos más importantes de las empresas, el nuevo Data Center atenderá a los clientes de gobierno y corporativos grandes, medianos y pequeños; y sus instalaciones servirán expresamente para el manejo, almacenamiento y custodia de dicha información.
Según Tigo, en el inmueble, los clientes empresariales podrán comprar de manera modular un espacio para almacenamiento de datos en la nube, respaldo y recuperación, escritorios virtuales, ciberseguridad entre otros servicios.
“Su propósito es darle a las grandes corporaciones, gobierno y medianos y pequeños empresarios, un centro de datos de clase mundial donde tengan su información de forma segura, que tengan redundancia sobre esa información y acceso a servicios digitales”, agregó Ramos.
El máximo representante de la compañía de telecomunicaciones insistió en que un centro de datos de esta talla servirá además como una plataforma para que los inversionistas extranjeros que quieran venir a hacer negocios en El Salvador, lo hagan efectivamente y tengan el beneficio de contar con un espacio que resguarde su información de la manera más segura.
Recordó que en el momento de decidir la conveniencia de invertir en un país, toda empresa evalúa estabilidad macroeconómica y política, si hay una clase media creciente con ánimo de consumo, la calidad de los trabajadores y el desarrollo digital del país; es decir, si cuenta con autopistas digitales, centros de datos y en términos generales su nivel de conectividad con el mundo.